VALÈNCIA. Las cajas rurales de la Comunitat Valenciana despidieron 2018 con unos depósitos -tanto del sector público como del sector privado residente- por valor de 14.127 millones de euros, lo que representó un incremento anual del 10,87%. O lo que es lo mismo: el mayor incremento anual desde 2006 cuando se dispararon un 16,22% cerrando aquel ejercicio en los 11.691 millones de euros. Así lo delata el último informe de la Conselleria de Hacienda y Modelo Económico con los datos completos del pasado año.
Unos datos que contrastan con la caída del 0,75% en lo que a bancos y cajas de ahorros se refiere, cuyos depósitos al cierre de 2018 alcanzaban los 111.411 millones de euros. Todo ello en un año marcado -como los últimos- por los 'tipos cero' del Banco Central Europeo (BCE), que se mantendrán como mínimo durante todo este 2019 como viene advirtiendo por activa y por pasiva el máximo responsable de la política monetaria de la Eurozona como es Mario Draghi.
"La desaparición de muchas sucursales bancarias en pequeñas poblaciones de la Comunitat Valenciana ha provocado que buena parte del dinero se haya trasvasado a las cooperativas de crédito, que han tomado en gran medida el relevo de las cajas de ahorro en sus territorios naturales. Y el perfil tipo de los clientes de esas pequeñas poblaciones es muy conservador, lo que significa que opten por mantener sus ahorros en depósitos", apunta el director de una de la treintena de cajas rurales valencianas que prefiere mantener el anonimato.
"En los últimos tiempos hemos captado muchos clientes que se habían quedado 'huérfanos' de entidades financieras y otros nos han llegado por el 'boca a boca', lo que a la postre se refleja en esos datos ascendentes de los depósitos", añade y no le falta razón a la hora de analizar este crecimiento de los depósitos de las cooperativas de crédito de la Comunitat. Precisamente las ubicadas en la provincia de València presentaron el mayor incremento (+16,54%), seguidas por las de Alicante (+6,82%) y Castellón (+3,59%), siempre según los datos de la Consellería de Hacienda y Modelo Económico.
Los depósitos bancarios del sector público y privado residente de todas las entidades de depósito que operan en la Comunitat Valenciana totalizaban 106.561 millones de euros al cierre de 2018, lo que situaba a esta región en el cuarto puesto del ranking nacional con una tasa de participación del 8,62% por detrás de la intratable comunidad madrileña con 350.063 millones y un ratio del 28,32%; Cataluña con 164.784 millones y un 13,33%; y Andalucía con 124.450 millones y un 9,99% respectivamente.
Otro cantar fue lo que créditos se refiere, dado que tanto bancos, cajas de ahorro -o mejor dicho Caixa Ontinyent- y cooperativas de crédito de la Comunitat Valenciana redujeron sus préstamos a lo largo del pasado ejercicio. Lo hicieron en un 3,97% hasta los 111.412 millones de euros aunque en el caso de las cooperativas de crédito la caída fue de casi la mitad (-2,13%). Y es que desde 2008 -el año del inicio de la crisis- los créditos siguen reduciéndose, pese a los esfuerzos del BCE de que el dinero fluya a la economía real, es decir, particulares y pymes.
La Comunitat Valenciana también ocupó la cuarta posición del ranking español en lo que a concesión de créditos al sector público y privado residente se refiere con esos 111.412 millones de euros concedidos, que equivalían a una tasa de participación del 9,16%. Por delante tenía a las mismas CC AA que en el apartado de depósitos lideradas por Madrid con 361.698 millones y el 29,75%; Cataluña con 208.105 millones y el 17,11%; y Andalucía con 147.772 millones y 12,15% respectivamente.
