VALÈNCIA. (EP). La superficie quemada en la Comunitat por incendios forestales en 2018 está por debajo de la media de la última década, con un total de 3.230 hectáreas afectadas desde enero a causa de 365 fuegos en el monte valenciano. Por provincias, en Castellón han resultado afectadas un total de 337 hectáreas, en Valencia 182 y en Alicante 113.
Para el secretario autonómico de Medio Ambiente, Fran Quesada, los resultados "ponen de manifiesto la necesidad de potenciar la prevención de incendios forestales", como ha defendido este martes en la jornada técnica post-incendios forestales, informa la Generalitat en un comunicado.
Se trata de un encuentro en el que, al final de cada campaña, se analizan por parte de todos los colectivos implicados --agentes medioambientales, bomberos, brigadas forestales, policía autonómica, guardia civil, Unidad Militar de Emergencias (UME) y Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), entre otros-- los resultados de los informes que elabora la dirección general de Prevención de Incendios Forestales.
"A pesar del otoño tan benigno que estamos teniendo gracias a las lluvias, no podemos bajar la guardia en ningún momento. Nuestro compromiso común por mantener nuestros bosques a salvo de la amenaza de los incendios nos tiene que mantener siempre alerta", ha reivindicado el responsable de Medio Ambiente.
Bajo este prisma, ha puesto en valor el trabajo que día a día desarrollan los profesionales en la lucha contra el fuego en nuestra Comunitat y el esfuerzo de coordinación de todos los efectivos. "Cada uno, en el marco de sus competencias, ha aportado su experiencia y su esfuerzo en la protección de nuestro territorio y sus gentes frente a los incendios forestales", ha aseverado.
En la jornada, los participantes han valorado el único gran incendio que ha tenido lugar en lo que va de año en la Comunitat, el de Llutxent (Valencia) y han analizado factores como la meteorología, vegetación y orografía, así como el grado de severidad y los impactos en la interfaz urbano-forestal.
Este fuego tuvo lugar en el mes de agosto, uno de los más calurosos y en el que se batió el récord de incendios producidos por rayo, que supusieron el 60% del total.
Por otro lado, en el foro se han presentado los resultados de los análisis con el programa Wildfire de simulación de grandes incendios. La directora general de Prevención de Incendios Forestales, Delia Álvarez, también ha repasado la campaña de comunicación y sensibilización 'Stop al foc', con "una amplia repercusión y un claro reflejo en el comportamiento y la colaboración de la ciudadanía a la hora de evitar conductas de riesgo".
En materia de vigilancia disuasoria se han llevado a cabo más de 9.000 actuaciones informativas y correctivas en la campaña de verano y más de 3.000 realizadas desde los observatorios en detección de humos y rayos. Han colaborado 79 equipos de voluntariado gracias a la orden de subvenciones de la Conselleria de Medio Ambiente, que este año ha contado con un presupuesto de 450.000 euros.