MADRID (EP). Homiii, la marca comercial de la gestora Excem Socimi Sir para el alquiler de pisos compartidos para estudiantes y jóvenes profesionales, ha alcanzado en sus dos años de andadura un 97,2% de ocupación de sus viviendas y un 0% de morosidad en el pago de las cuotas de alquileres, según el documento de incorporación al Mercado Alternativo Bursátil (MAB), donde cotiza desde el 19 de julio de 2018.
En estos dos primeros años, Homiii ha comprado 42 pisos que suman en torno a 8.000 metros cuadrados y 300 habitaciones para el curso 2018-2019. Todas ellas se encuentran ubicadas en zonas céntricas de Madrid como Moncloa, Chamberí, Centro y Salamanca. Según precisa la compañía, Homiii es el primer proyecto de 'co-living' en España a través del modelo de piso compartido que cotiza en el MAB.
Esta socimi residencial ha alcanzado una rentabilidad bruta del 7,5% sin incluir la posible revalorización de la cartera de activos que han comprado, según puntualiza. Su objetivo de negocio es gestionar más de 4.000 habitaciones, en ubicaciones para los millennials o zonas de mayor crecimiento. Por ello, señala que Excem Socimi Sir requeriría una inversión de 300 millones de euros. "En estos dos años de actividad Homiii ha conseguido posicionarse en Madrid como un referente en el alquiler profesional de piso compartido", asegura la compañía.
Su proyecto es llevar este modelo de negocio a las principales ciudades españolas en los próximos años. De su análisis de mercado se desprende que son 400.000 los estudiantes y jóvenes profesionales que llegan cada año a España, de los cuales el 90% busca alojamiento compartido.
Excem Socimi Sir compra pisos y después los reforma "con buenas calidades y un diseño actual", con equipamiento WiFi y Netflix, para después alquilar por habitaciones. En una encuesta realizada por la marca Homiii, la satisfacción de los clientes de los pisos compartidos ha sido de "un 90 por ciento".
El CEO y responsable de este modelo de negocio, Antonio Mochón, presenta Excem Socimi Sir como "una inversión segura y estable. Nuestra capacidad de generar rentas, aún en un proceso inmobiliario bajista, es muy sólida. Siempre llama la atención porque no es una inversión residencial tradicional y, por este motivo, es muy segura. En nuestro caso un estudiante es un joven para el que tanto la matrícula de estudios como el alojamiento es un gasto familiar que se cubre plenamente y no existen impagos", explica.