El responsable de renta variable estadounidense de Lazard ofrece su visión tanto sobre la renta variable como la renta fija, mientras recuerda que "los activos financieros en general no están baratos"
MADRID. Los activos financieros en general no están baratos, ni en relación con sus medias históricas, ni en términos absolutos. Por ello, creemos firmemente que la selección de activos será fundamental para generar rendimientos en los próximos años, a medida que se normalice el crecimiento mundial y que el "dinero fácil" de los rallies de mercado de los últimos años sea más difícil de conseguir.
En este escenario, vemos la renta fija como la clase de activo menos atractiva, con la excepción de la deuda de los mercados emergentes. Las valoraciones de las bolsas son altas, pero más atractivas que la deuda. Dentro de la renta fija, somos particularmente negativos en deuda soberana de los mercados desarrollados. En la zona del euro, por ejemplo, los rendimientos nominales son negativos en el 50% de los bonos de gobierno, lo que significa que, en muchos casos, se garantiza que los inversores perderán dinero al invertir en estos activos.
En términos reales, una gran mayoría de la deuda pública de la zona euro tiene un rendimiento negativo. Los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE UU son más altos, pero eso se mide en comparación con una barra extraordinariamente baja. Con un IPC subyacente en EE.UU. oscilando entre 1.7% -2.3% en el último año, el rendimiento real de un bono del Tesoro a 10 años apenas ha sido positivo.
Nuestra visión negativa sobre la deuda soberana de los mercados desarrollados considera, no solo los rendimientos actuales, sino también nuestra expectativa de que el extremo largo de la curva se venderá durante los próximos 6 a 12 meses, a medida que el BCE reduzca las compras de activos, la Fed continúe normalizando su política y la economía mundial siga siendo resistente, elevando las expectativas de inflación y difuminando las preocupaciones negativas persistentes.
Mirando más allá de los mercados desarrollados, vemos que la deuda soberana de los mercados emergentes es particularmente atractiva con un rendimiento superior al 6%. A la luz de las reformas estructurales desde el "Taper Tantrum" de 2013, vemos sólidos rendimientos relativos y absolutos además de sus beneficios de diversificación.
En el mercado de renta variable, las valoraciones presentan primas por encima de sus niveles históricos. Utilizando la relación entre la medina de los últimos 10 años / PER como punto de referencia para cada mercado, llegamos a las siguientes conclusiones:
A pesar de las primas de valoración de estos mercados, seguimos siendo positivos con la renta variable debido a que los aumentos de beneficios probablemente excedan el 10% para todos los principales mercados en los próximos 12 meses.
Ron Temple es director de Renta Variable de EE UU de Lazard Asset Management
El experto recomienda Europa y Japón como áreas geográficas para invertir actualmente en renta variable antes que hacerlo en Estados Unidos
De izquierda a derecha en la primera fila: Francisco Varea (Edetania Patrimonios), Antonio Aspas (Buy & Hold), Carlos Muro (Banca March), Amparo Belenguer (Ibercaja), Alejandro Martínez (EFE & ENE), Mónica Blesa (Caixa Popular) y David Nogués (Indosuez). Debajo siguiendo el mismo orden: Guillermo González-Fleitas (Circulantis), Santa Pérez (Talenta Gestión), Javier Navarro (Vinca Capital), Juan Carlos López (Colectual), Juan Luis Pastor (atl Capital), Luis Capilla (Mirabaud) y Sergio Montesinos (Creand)