VALÈNCIA. (EP). El número de personas que acude a un dietista-nutricionista después del periodo vacacional se duplica por los excesos que se producen en esta época, que provocan un aumento gradual de peso entre los españoles de entre 2 y 5 kilos, según el Colegio Oficial de Dietistas y Nutricionistas de la Comunitat Valenciana (CODiNuCoVa).
Los nutricionistas han alertado en un comunicado de esta tendencia y "los problemas que acarrean los pacientes postvacacionales para recibir asesoramiento nutricional, entre los que destacan la falta de interés, el escaso compromiso con el tratamiento dietético y la fijación de objetivos de pérdida de peso poco realistas y perjudiciales para la salud". Estos problemas impiden seguir, en muchas ocasiones, las pautas marcadas y, a largo plazo, mantener una alimentación variada y completa nutricionalmente.
Según los expertos, los pacientes postvacacionales responden a dos perfiles principalmente: por un lado, pacientes que ya venían a consulta y habían adquirido buenos hábitos pero que tras una temporada estival han retomado hábitos poco saludables; por otro, pacientes que piden una primera cita con el profesional porque han experimentado un incremento del peso en la temporada estival.
Así lo ha indicado Christian Mañas, miembro de la junta directiva del CODiNuCoVa, que ha detallado que en la mayor parte de los casos la pérdida de peso por cuestiones estéticas es el principal motivo de las consultas, aunque también acuden pacientes que padecen patologías crónicas en las que la alimentación juega un papel fundamental (como diabetes, hipertensión o dislipemia) y requieren un tratamiento dietético para lidiar contra su enfermedad.
Con el propósito de ayudar a estas personas que quieren acabar con los malos hábitos instaurados durante los tres meses de vacaciones y transmitir qué es una alimentación saludable, el CODiNuCoVa ha lanzado la campaña #nutrichange.
Bajo este hashtag, cualquier usuario podrá compartir sus dudas en Twitter sobre cómo mantener una alimentación variada y completa nutricionalmente y animar a que otros se sumen al reto mostrando los cambios que ha ido incorporando en su dieta después del periodo vacacional.
Un día a la semana, los dietistas-nutricionistas responderán sus dudas, desmontarán falsos mitos sobre alimentos o dietas que se han puesto de moda y ofrecerán platos y alternativas de alimentación saludable como una primera toma de contacto que requerirá para ser completa un asesoramiento nutricional en consulta.
"Desde el Colegio queremos acabar con la cantidad de desinformación que circula por las redes sobre la alimentación, que no tiene ningún control ni evidencia científica y que desvirtúa la figura y la importancia de acudir a un profesional sanitario como son los dietistas-nutricionistas, imprescindibles para la salud de las personas. Somos los titulados expertos en alimentación y nutrición y en consulta podemos y debemos tratar los problemas o necesidades nutricionales que los pacientes requieran", ha concluido Paula Crespo, presidenta del CODiNuCoVa.
Esta campaña de promoción de hábitos alimenticios saludables también quiere hacer frente a un problema de concepto que se repite frecuentemente en las consultas: comer saludablemente significa sufrir.
"Comer también es disfrutar. Los profesionales de la alimentación también tenemos paladar, el paladar se educa y, si se siguen las pautas que indicamos, la interpretación de que estar a régimen es sufrir cambia completamente después de pocas consultas", ha afirmado Luis Cabañas, secretario del CODiNuCoVa.
Otro de los principales problemas asociados a los pacientes postvacacionales y que dificultan el tratamiento nutricional es la idea de que se pueden cambiar los hábitos adquiridos rápidamente, ante lo que Cabañas ha explicado: "Excederse es muy fácil y en verano parece que se dé barra libre al alcohol, a más fritos, a más ultraprocesados (como helados comerciales, precocinados, congelados) y se consumen menos verduras".
"Se cree que este exceso se puede revertir en pocos días y por eso la gente se marca objetivos poco realistas como adelgazar cinco kilos en una semana, perder solo grasa en el abdomen o reducir un periodo muy concreto de tiempo para participar en una competición. Aunque es muy fácil adaptarse a tomar una cerveza todos los días, es muy difícil incorporar más fruta en nuestros desayunos", ha agregado.
La falta de concienciación de los pacientes también provoca, desde la perspectiva de Christian Mañas, una falta de adhesión al tratamiento dietético: "Hay gente que empieza un tratamiento dietético por sentirse bien psicológicamente más que por realmente querer mejorar la alimentación y conseguir su objetivo. Esta gente es fácilmente identificable porque suelen cambiar las citas, exculparse de no haber seguido las pautas y, en definitiva, no se implican en el cambio de hábitos".