VALÈNCIA. Seis meses les costó a los grupos parlamentarios llegar a un acuerdo. El pasado martes, los síndicos de los cinco partidos fijaron para el pleno de esta semana la votación de los candidatos propuestos por el parlamento valenciano para renovar el Consell Jurídic Consultiu y, con ello, ponían fecha para tachar una tarea que tenían pendiente desde el 2 de septiembre.
Pero la alegría ha durado poco. A tan sólo unas horas de producirse las votaciones, el PSPV solicitó este martes retirarla del orden del día porque esta renovación "incumple el artículo 178.1 del reglamento de Les Corts", según el comunicado de los socialistas.
La obligación que marca este artículo de que en la elección y designación de personas propuestas por el Pleno de Les Corts se garantice una composición "paritaria de mujeres y hombres", encendía las alarmas en el edificio de los grupos parlamentarios. Ninguno de los tres nombres que se iban a votar –Enrique Fliquete, Rubén Martínez Dalmau y José María Tomás y Tío, propuestos por PP, Podemos y Ciudadanos, respectivamente-, era el de una mujer. Y, a lo paradójico que hubiera resultado que en el Día Internacional de la Mujer -8 de marzo- sólo se votaran hombres para renovar el órgano consultivo, se sumaba el incumplimiento de la normativa de la Cámara.
Cabe recordar que, ante el escenario que se presentaba para este miércoles -que los tres partidos que no se integran en el Gobierno valenciano propusieran a tres juristas varones-, Compromís planteaba al resto de partidos en la pasada junta de síndics modificar la ley del Consell Jurídic Consultiu. Una iniciativa que pretendía que en las siguientes renovaciones no volviera a darse tal situación y fuese obligatorio fijar el nombre de una mujer sobre el papel. Además de actuar como condicionante para que los nacionalistas participasen en la votación.
A tal propuesta, el PP se oponía alegando que solo apoyarían una iniciativa así si también se modificaba el articulado de las leyes del resto de órganos estatutarios para garantizar la paridad en todos ellos. Oferta que los de Fran Ferri aceptaban y redactaban el pasado viernes.
Para registrarla antes del pleno del miércoles, el síndico de Compromís recogía los apoyos de todos los grupos parlamentarios. De todos menos del propio Partido Popular y de Ciudadanos. Los primeros cambiaban de opinión pasada una semana y no aceptaban esta propuesta por vestirla, decían, de "chantaje"; y los naranjas de Alexis Marí apostaban por la "meritocracia" y no por la validez de los candidatos en función de su sexo.
Sin embargo, ya no será necesario sumar más o menos apoyos, porque la norma ya está creada, solo que nadie cayó en ella. Y el enunciado olvidado por PSPV, Compromís, PP, Podemos y Ciudadanos no sólo provoca que de nuevo el proceso quede paralizado, sino que obliga a que al menos uno de los grupos que han propuesto a "un jurista de reconocido prestigio y con más de 10 años de experiencia" deba cambiar su apuesta y vuelva a la casilla de salida para pensar en una candidata. Retroceder en el tiempo nada más y nada menos que seis meses.
La maniobra del PSPV molestaba especialmente al partido que permite la estabilidad del Gobierno. El portavoz Podemos en Les Corts y secretario general de esta formación en la Comunitat, Antonio Montiel, cargaba duramente contra PSPV por este cambio de última hora. "Hemos sido utilizados. Los socialistas quieren que se mantenga el statu quo, garantizar que los partidos tradicionales -PSPV y PP- tengan su representación en los órganos".
Sin embargo, no sólo arremetía contra el PSPV en Les Corts. En declaraciones a Valencia Plaza, Montiel mostraba su malestar con el Consell e incluso llegaba a plantearse cómo sería la relación de ahora en adelante con los partidos firmantes del Pacte del Botànic: "Estoy muy descontento por cómo ha manejado esto el Gobierno. Primero rompen el protocolo habitual seguido durante años, luego nos dicen que nos pongamos de acuerdo Podemos, PP y Ciudadanos porque ellos ya tienen garantizada la representación con la renovación acometida por el Consell, como si nosotros formásemos parte de la oposición y, además, nos imponen que durante semanas perdamos el tiempo yendo a reuniones para desbloquear la situación. Y cuando lo hacemos, se lo cargan. Tomamos nota y actuaremos en consecuencia. Meditaremos a partir de ahora cuál va a ser nuestra actitud con el Gobierno".
Por su parte, el portavoz de Ciudadanos también se mostraba molesto con la actitud de los socialistas y advertía de que esta decisión traería "consecuencias graves", aunque no señalaba cuáles. Después de haber permitido el desbloqueo de la elección asegurando que apoyarían a cualquier candidato aunque no fuera de su agrado, los naranjas también estallaban.
A pesar del revuelo que esta noticia causaba a media tarde, el grupo que lidera Fran Ferri mostraba sus dudas de si finalmente el punto caerá del orden del día. Desde la coalición valenciana entienden que esta renovación no incumpliría el artículo 178.1 del reglamento de Les Corts porque realizan otra interpretación que la que hace el PSPV.
Concretamente el texto dice que cada grupo parlamentario "podrá proponer un número máximo de candidatos o candidatas que corresponda a los puestos a cubrir. Las propuestas deberán garantizar una composición paritaria de mujeres y hombres". Al tratarse de una renovación de tres miembros, los nacionalistas entienden que PP, Ciudadanos y Podemos no estarían incumpliendo la normativa porque tan sólo han presentado un candidato. "Si sólo registras un nombre, no puedes cumplir con la paridad", subrayaban.
Así, fuentes de Compromís matizan que, en todo caso, deberá ser la Mesa de Les Corts quien determine si es un asunto que les compete dirimir a ellos -si cae el punto o no- porque se hace referencia al articulado de la Cámara.
En cualquier caso, el argumento de Compromís, en caso de aceptarse, solo serviría para consumar un error evidente, como es la elección de tres hombres y ninguna mujer a pesar de un reglamento que fue modificado para evitar esto.
El pasado mes de octubre, Les Corts también tachaban de su lista una tarea pendiente: la elección de los miembros del Consejo Rector de la Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació (CVMC). Para este órgano, cada grupo debía proponer un candidato o candidata como vocal. Y también en esa ocasión los partidos pensaron en un hombre. El PP presentaba a Vicente Cutanda, el PSOE a Vicente Vergara, por Compromís a Rafa Xambo y Ciudadanos a José Martínez Sáez. Tan sólo los morados apostaron por una mujer: María Lozano.
A pesar de la evidente falta de paridad entre estos cinco consejeros y las dudas que esto suscita, según fuentes parlamentarias socialistas consultadas por este diario, en aquella ocasión no incumplieron el reglamento de Les Corts -aunque las dos propuestas del PSPV fuesen hombres: el presidente Enrique Soriano y el vocal, Vergara-. El argumento que esgrimen es que al quedar en manos del pleno también el nombramiento de los miembros del Consejo Audiovisual -Mar Iglesias (Compromís) y Raquel Piqueras (Cs)- y el del Consejo de la Ciudadanía -la no electa Maite Fernández (PP)- por no estar constituidos estos órganos, los grupos del parlamento valenciano sí cumplieron con la norma porque se dio una paridad de 5-4.
Casi dos años después de que los partidos modificaran el reglamento de Les Corts al percatarse de que los cinco nombres propuestos para formar parte de la Mesa de la Cámara eran todo hombres -Francesc Colomer (PSPV), Enric Morera (Compromís), Alejandro Font de Mora (PP), Emilio Argüeso (Ciudadanos) y Marc Pallarés (Podemos)-, los grupos parlamentarios vuelven a tropezar con la misma piedra.
Si en aquella ocasión la modificación situaba a la diputada socialista Carmen Martínez en el lugar que habría ocupado el secretario autonómico de la Agencia Valenciana de Turismo, ahora será uno de los grupos que no se integra en el Consell el que deberá cambiar su apuesta y volver a empezar su recorrido. Como si de la película de Harold Ramis Atrapado en el tiempo se tratara, la renovación del CJC está cerca de convertirse en el Día de la Marmota.