De la marcha de ambos se puede obtener un punto de partida para conocer la situación por la que atraviesan los mercados, según el experto de XTB
MADRID. Es sabido por todos la relación inversa que mantienen el conocido como 'índice del miedo' VIX (Volatility Index) frente al precio del bono americano, principalmente el diez años (Treasury Note 10 years). Si analizamos más profundamente el índice VIX, vemos que los antecedentes del mismo muestran un incremento en la valoración del mismo cuando el mercado se enfrenta a situaciones de incertidumbre. Esta incertidumbre suele asociarse en la mayoría de los casos a un escenario negativo -de ahí que se le conozca como el 'índice del miedo'-, ya que en los momentos en los que se producen apreciaciones notables en la renta variable el VIX también sufre un incremento en su valoración.
Pero aun así mucho menor cuando el hecho en cuestión que ha provocado el incremento en su valoración se asocia a una serie de sucesos negativos. La media de este selectivo durante los últimos meses -y en un escenario de relativa calma- oscila entre 11 y 12 puntos, pudiendo alcanzar en los momentos de mayor incertidumbre como vimos algunos días atrás los 21 puntos.
Centrándonos ahora en el Treasury Note 10 years es importante recalcar la medición que vamos a hacer del mismo. Si lo analizamos tal y como hemos especificado en este artículo -a través de su precio- a medida que este desciende significará que el apetito por la renta fija se va incrementado. Por otro lado, si hubiésemos utilizado la rentabilidad anual que ofrece como dato de referencia la situación sería la inversa, es decir, a medida que se incrementase, el interés por la renta fija aumentaría.
Los principales motivos por los que el precio del bono puede sufrir correcciones proviene de dos factores fundamentales: por un lado de la apreciación de la divisa en cuestión -motivada normalmente por una política monetaria contractiva- y, por otro, por la actuación como activo refugio frente a un incremento en la incertidumbre o volatilidad en los mercados de renta variable.
El precio medio del bono en los últimos meses se ha mantenido entre los 120 y los 119,5 puntos, llegando en el momentos de mayor pánico bursátil citado anteriormente a los 117,5 puntos, lo cual coincide con una rentabilidad superior al 3% del activo en cuestión.
Por tanto, si tenemos pensado realizar un primer análisis de manera generalizada -y sin tener en cuenta otros indicadores a priori-, podemos tomar la relación entre ambos activos como un punto de partida para conocer la situación de los mercados financieros.
Antonio Sales es analista de XTB