VEGA BAJA. La Comunitat Valenciana ha multiplicado por 58 la superficie agrícola certificada como ecológica en los últimos 23 años y por 12 el número de productores. En 1996, la Comunitat tenía certificada 2.181 ha de cultivo ecológico y en 2019 ascendió a 127.909 ha, según los datos del Comité de Agricultura Ecológica de la Comunitat Valenciana (CAECV). Es el organismo encargado de la certificación. En ese mismo periodo, se ha pasado de 200 productores a 2.484. El producto estrella en la Vega Baja es el limón.
En una comarca con una arraigada producción tradicional, se está abriendo camino el cultivo ecológico. Según los últimos datos que recoge el CAECV, en 2019, la Vega Baja ocupa la sexta posición en cuanto a la comarca de toda la Comunitat con mayor superficie: 6.533 ha. Dentro de esa superficie el claro dominante es el cultivo de cítricos, con más de la mitad del total. A su vez, dentro de las 2.593 ha de cítricos, 2.122 son de limón. En toda la Comunitat hay 2.151 ha. El 98% de la producción.
En cuanto al número de agricultores, o como denominan en el CAECV, productores, la Vega Baja es la segunda comarca con mayor número, cuenta con 218. Solo le supera Utiel-Requena con 557. Uno de esos productores de la Vega Baja es José Manuel Pamies. Era agricultor convencional y hace cuatro años inició el proceso de conversión al ecológico. El año pasado fue el primero que pudo comercializar su limón como ecológico. De una hectárea y media produjo unos 40.000 kg. "De alguna manera hay que diferenciarse" explica al preguntarle por la razón que le llevó a producir limones ecológicos. Lo comercializa a través de una cooperativa y los principales clientes se encuentran en Alemania y Francia. Asegura que esta conversión le ha supuesto un ahorro en fitosanitarios y fertilizantes. Además, la rentabilidad es mayor. El kilo se lo pagaron el año pasadoa 96 céntimos, mientras que el convencional se encontraba en una media de 0,25 euros más barato. Y la campaña de este año a 1,20 euros. No es lo único que produce, aunque sí es el más importante. También ha producido mandarina tardía y pomelo.
De 2018 a 2019, la apuesta por el cultivo ecológico en la Vega Baja ha experimentado un salto exponencial. La superficie total ha pasado de 2.018 ha a 6.533. En cuanto a los cítricos. De 1.660 ha en 2018, en la actualidad hay certificadas 2.593 ha. Las hortalizas también han subido en el último año. De 172 ha a 203 ha. De esta forma, se convierte en la comarca con mayor superficie de hortalizadas certificadas como ecológicas.
Desde el Comité de Agricultura señalan que en los últimos años, dada la baja rentabilidad del producto convencional y que ahoga a los agricultores, y ante una falta de relevo generacional, "mucha gente se está incorporando directamente al ecológico, sobre todo jóvenes y mujeres" explican. Señalan que el volumen de producción puede ser menor, "pero está creciendo la rentabilidad".
Según los últimos datos -2018- de la Consellería de Agricultura de la Comunitat Valenciana, la superficie total destinada a la agricultura en la Vega Baja ascendía a 36.598 ha. De esas, 22.789 corresponden al cultivo de cítricos. Esto supone que el 7% pertenecía a cultivos ecológicos. Pero atendiendo a las últimas cifras, las de 2019, el porcentaje ascendería al 29%. En materia de hortalizas, la Consellería tiene contabilizadas 7.261 ha. De éstas, 203 están certificadas como ecológicas.