Toni Such. Foto EVA MAÑEZVALÈNCIA/ALICANTE. El presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, ha hecho este jueves su primer intento para sumarse al Fondo de Cooperación Municipal, una especie de bote que nutren la Generalitat y las diputaciones -Alicante todavía no forma parte de él-, dotado de 40 millones de euros, que reparte transferencias de capital a los ayuntamientos en función de su población. Mazón ha insistido en la idea de que "se respeten los criterios de reparto poblacional que beneficien a las poblaciones más pequeñas”. La Generalitat se ha vanagloriado de su cambio de actitud y querer sumarse ahora a la iniciativa, pero la ha recordado que para formar parte del fondo hay que cumplir dos condiciones: adherirse a través de un acuerdo plenario y distribuir las transferencia de dinero de manera objetiva y sin condiciones; es decir, el dinero no puede ir a un determinado fin; la finalidad la establece el beneficiario, en este caso, el ayuntamiento de turno.
El director general de Administración Pública, Antoni Such, ha considerado que el reparto del dinero lo puede hacer la Diputación de Alicante como quiera siempre que sea un reparto objetivo y no condicionado. "Lo que debe hacer el señor Mazón es consignar los 13,7 millones que le corresponden a la Diputación de Alicante; posteriormente, el reparto lo puede hacer como considere", ha indicado Such, quien han insistido en la idea de la obligatoriedad y en la no condicionalidad de los fondos. "Los ayuntamientos pueden destinarlos a lo que ellos consideren o necesiten", ha afirmado.
Pero además de los criterios de reparto, la Diputación de Alicante y la Generalitat chocan en la obligatoriedad. A juicio de Mazón, formar parte del Fondo debe ser voluntario, y no obligatorio, una cuestión, ha dicho, que propondrá debatir en la Mesa Bilateral entre ambas instituciones, “cuyo retraso acumulado nos impide abordar estas y otras cuestiones importantes para nuestra provincia”.
Mazón ha participado este jueves en la Comisión de Seguimiento del Fondo de Cooperación Municipal de la Generalitat Valenciana y en ella, ha puesto en valor el plan + Cerca puesto en marcha por la institución alicantina, dotado de 30 millones procedentes de los remanentes del ejercicio anterior. "El cambio de las reglas fiscales sobre la utilización de remanentes en 2021 ha posibilitado que la Diputacion haya proyectado el Plan + Cerca, que podrían incorporarse a este Fondo de Cooperación Municipal en tanto se respeten las condiciones estipuladas por la institución alicantina que priorizan, especialmente, la atención a los pequeños municipios", ha defendido el dirigente del PP.
¿Por qué lo propone ahora? ¿O por qué ha cambiado de opinión Mazón? Según su propia versión, la Diputación no dispone de crédito ordinario para aportar los 13,7 millones que le obliga formar parte de la Fondo de Cooperación y quiere hacerlo con los remanentes del ejercicio anterior. Y Mazón, como ha reiterado en muchas ocasiones, asegura que no dispone de crédito ordinario porque tiene que hacer frente a las competencias impropias que asume la Diputación de Alicante ante la negativa de la Generalitat a hacerse cargo de las mismas, como son las gestión del Hogar Provincial y del centro de salud mental Doctor Esquerdo.
El responsable institucional ha insistido en “encontrar puntos de encuentro” para incorporar a la Diputación de Alicante en el Fondo de Cooperación de 2021, que podrá estar destinado a gasto corriente e inversiones, tal como permite actualmente la regla fiscal, y para ello urge la convocatoria de la Comisión Bilateral.
