MADRID (EP). Inditex registró unas pérdidas de 409 millones de euros durante el primer trimestre de su año fiscal 2020-2021 (desde el 1 de febrero al 30 de abril), frente al beneficio de 734 millones de un año antes, como consecuencia del impacto económico de la crisis sanitaria del Covid-19, según ha informado la compañía gallega, que reduce un 60% su dividendo ordinario, desde los 0,88 a 0,35 euros, y pospone un año el pago del extraordinario.
Dicho resultado incluye una provisión por la conclusión del programa de optimización de espacio por 308 millones de euros. Sin esa provisión el resultado hubiera sido negativo en 175 millones de euros. Las ventas de Inditex han caído un 44%, hasta 3.303 millones de euros, a pesar de que en el periodo ha llegado a estar cerrado hasta el 88% del parque total de tiendas, debido a la pandemia del Covid-19. Asimismo, las ventas 'online' crecieron un 50% en el trimestre y un 95% en abril.
Igualmente, la venta en tienda y 'online' a tipo de cambio constante decreció un 51% en el mes de mayo y un 34% desde el 2 de junio hasta el 8 de junio. En aquellos mercados en que las tiendas estaban plenamente abiertas (54% de las tiendas totales) la venta bajó un 16%.
Por su parte, el resultado operativo (Ebitda) se situó en 484 millones de euros frente a los 1.675 millones de euros de un año antes. Asimismo, la compañía propondrá a la junta general de accionistas, que se celebrará el próximo día 14 de julio la distribución de un dividendo por importe de 0,35 euros brutos por acción, con cargo a reservas de libre disposición, que serán desembolsados el próximo 2 de noviembre, lo que supone un descenso del 60% respecto a los 0,88 euros anteriores.
El margen bruto se situó en 1.930 millones de euros, por debajo de los 3.524 millones de euros de un año antes, situándose en el 58,4% de las ventas (59,5% en el primer trimestre fiscal de 2019), con un inventario que a cierre del trimestre fue un 10% inferior, según ha señalado la compañía, cuyos gastos operativos bajaron un 21% y se han mantenido bajo "estricto control".
En este contexto, marcado por la pandemia, el presidente de Inditex, Pablo Isla ha enviado un mensaje de solidaridad con todas las personas que han sido víctimas o se han visto afectadas familiarmente por la covid-19, al tiempo que ha transmitido un agradecimiento a la plantilla de Inditex en todo el mundo, "por su implicación y responsabilidad".
"Nuestra prioridad es la salud y seguridad de nuestras personas y nuestros clientes. Por eso quiero manifestar públicamente el agradecimiento por la altísima implicación de todo nuestro personal durante la emergencia sanitaria y durante el regreso a las tiendas y centros operativos. Como hemos manifestado siempre, lo más importante para Inditex son las personas por encima de cualquier otra consideración, y creo que estas circunstancias que estamos viviendo actualmente lo demuestran", ha afirmado el presidente de Inditex, Pablo Isla.
Asimismo, la compañía propondrá a la junta general de accionistas, que se celebrará el próximo día 14 de julio la distribución de un dividendo por importe de 0,35 euros brutos por acción, con cargo a reservas de libre disposición, que serán desembolsados el próximo 2 de noviembre, con un descenso del 60% respecto a los 0,88 euros del año pasado.
Según Inditex, la política de dividendos de la compañía se mantiene intacta, con un 'payout' del 60%, así como el complemento de un dividendo extraordinario total de 0,78 euros por acción, cuya distribución estaba prevista para los años 2020 y 2021, y que pasarán a repartirse en 2021 y 2022.
En el primer trimestre de este año, Inditex ha realizado aperturas en nueve mercados. Al cierre del trimestre Inditex operaba 7.412 tiendas, según ha señalado la firma, que ha afirmado que su posición de liquidez es "robusta".
En concreto, la posición financiera neta al 30 de abril de 2020 asciende a 5.752 millones de euros.
Por otro lado, el presidente de Inditex, Pablo Isla, ha presentado un plan 2020-2022 que anticipa lo que será el futuro de Inditex, con una inversión de 1.000 millones para reforzar la apuesta por 'online' y 1.700 millones para las tiendas tecnológicamente integrada.
Dicho plan supone, según Isla, "culminar el proyecto cuyas bases se han ido sentando progresivamente con importantes inversiones desde 2012, que va a transformar significativamente el perfil de la compañía".
Así, Isla ha explicado que el objetivo de aquí a 2022 es adelantar la implantación total del concepto de tienda integrada, cuyo futuro estará vinculado al servicio "permanente" al cliente "allá donde se encuentre, en cualquier dispositivo, y en todo momento".
El plan prevé que las ventas por internet alcanzarán más del 25% del total en 2022, desde el 14% de 2019, con una red de tiendas integrada "más ágil y sostenible", que incorporará nuevas herramientas tecnológicas, con una superficie media por tienda más grande, mayores niveles de rentabilidad, y que crecerá entre un 4% y un 6% en tiendas comparables.