MADRID. Con un beneficio histórico en 2016 y una revalorización cercana al 25%, parece que la fusión con Siemens le ha sentado bien a Gamesa. Dicha fusión se completará durante este primer trimestre y el efecto más interesante para los inversores será el anunciado reparto de dividendo cercano a los 3,75 euros por acción gracias a la incorporación de la empresa alemana.
A nivel técnico, las acciones de Gamesa continúan con una tendencia alcista impecable respetando la tendencial de largo plazo marcada desde los mínimos de 2011, reforzada esta tendencia por el RSI que sigue marcando mínimos crecientes y aún se encuentra relativamente alejado de la zona de sobrecompra.
En el más estricto corto plazo, la media móvil de las últimas sesiones ha cruzado al alza la media de periodos mayores, lo cual también es un indicador que da fortaleza a la escalada alcista de Gamesa, y que puede suponer una buena señal de compra de sus acciones por parte de los inversores.
Por tanto es probable que la española busque, en primer término, la recuperación de la zona de 20,55 euros para una vez consolidado se lance de nuevo a los máximos de 21,70 euros. De romper a la baja los indicadores mencionados es posible que veamos una regresión a la tendencial, por lo que marcaríamos nuestro punto de salida en los 18,21 euros.
Sergio Puente es analista de XTB
