CASTELLÓ. La compañía castellonense Facsa, especializada en el ciclo integral del agua, dio en 2019 un salto relevante en su actividad, al sumar prácticamente 15 millones de euros a su facturación y superar los 103. La firma, que ha venido centrando gran parte de su negocio en la provincia de Castellón y en la Comunitat Valenciana, basa este crecimiento en "la búsqueda de nuevas líneas de negocio dentro del ciclo integral del agua" y "la consolidación geográfica a otras comunidades autónomas, como Castilla-La Mancha, Aragón, Navarra, Murcia, Asturias, Andalucía, Castilla y León y Baleares", según recoge el informe de gestión que acompaña a sus cuentas.
No en vano, el año pasado la firma hídrica del Grupo Gimeno continuó sumando concesiones en lugares como Baleares y Andalucía, que se incorporaron a las que ya iba captando en ejercicios anteriores, lo que le permitió elevar su cifra de negocio.
Asimismo, las cuentas individuales de esta firma nacida en Castelló en 1888 también recogen que el beneficio neto del año pasado alcanzó los 10,6 millones de euros, ligeramente superiores a los del ejercicio anterior. De este montante, la compañía ha destinado 2,7 millones a dividendos, mientras el resto lo ha aplicado a reservas.
En cuanto a la incertidumbre que rodea la actividad económica mundial, los directivos de Sociedad de Fomento Agrícola Castellonense SA piden en el informe de gestión que acompaña a las cuentas recientemente depositadas "una reacción enérgica y coordinada de las políticas económicas para amortiguar los efectos negativos sobre hogares y empresas y devolver a la economía cuanto antes a una senda de crecimiento sostenido y de creación de empleo".
A pesar de ello, los administradores destacan que las actividades a las que la firma se dedica principalmente (el agua potable y el saneamiento) "serán de las menos afectadas en la hipótesis de un parón de la actividad económica nacional". Y es que son actividades "irrenunciables por parte del consumidor final" y su precio ya está "tasado de forma oficial". Gracias a ello en la empresa prevén cerrar 2020 con "un crecimiento del negocio".
En este contexto, la sociedad integrada en Grupo Gimeno pretende incidir en "la apertura a nuevos mercados y nuevas actividades dentro del ciclo integral del agua". Esto prevé hacerlo principalmente en base a recursos propios "por prudencia ante la recuperación de los mercados" y a pesar de que la sociedad "viene observando desde 2015 una notable mejoría en la predisposición por parte de las entidades financieras en el acceso a las diferentes líneas de acceso al crédito".
Esto, "unido a la evolución de la sociedad, supondrá una palanca de lanzamiento con unas inmejorables expectativas futuras", recogen las cuentas. No en vano, las actividades de Facsa, que se ha convertido en un referente estatal del sector, "se encuentran vinculadas con contratos de concesión administrativa a largo plazo, con una duración media de los mismos entre 25 y 50 años". Aunque la mayoría los desarrolla por sí misma, al cierre de 2019 participaba en 28 uniones temporales de empresas.
El incremento de la actividad de Facsa se vio acompañado por un aumento de su plantilla, que a 31 de diciembre de 2019 contaba con 856 empleados en nómina, 61 más que en el ejercicio anterior. Y es que su personal, con "más de 150 titulados medios y superiores", es "el verdadero motor de la innovación en la empresa".