VALÈNCIA. (EFE). Cándido Herrero, el exgerente de Orange Market, la empresa de la trama Gürtel en València, se ha acogido hoy a su derecho a no declarar en la pieza del caso sobre contrataciones a su empresa por parte de la Generalitat, en la que está investigado el expresident Francisco Camps.
En esta pieza, el juez de la Audiencia Nacional José de la Mata investiga a Camps y a otras ocho personas por la adjudicación a la empresa de Correa Orange Market de dos contratos: el expositor "Grandes eventos" de Fitur 2009 y la elaboración en 2005 de la Guía de la Comunicación de la Generalitat.
Herrero, condenado a 5 años de cárcel en el juicio de Gürtel sobre la financiación ilegal del PP valenciano, ha comparecido por videoconferencia y ha optado por no responder a las preguntas sobre estas contrataciones, según han informado fuentes jurídicas.
En el juicio de la financiación irregular del PP valenciano reconoció que elaboró las facturas de Orange Market, si bien dijo que lo hacía "al dictado" de dos de los cabecillas de la trama, Pablo Crespo y Álvaro Pérez, el Bigotes, que eran "los que mandaban".
Herrero se desvinculó en cambio de cualquier responsabilidad en la facturación de los actos de campaña de las elecciones de 2007 y 2008 que la trama organizó para el PP y que presuntamente se financiaron ilegalmente.
Mañana está citado a declarar El Bigotes, que está en prisión por Gürtel, y el viernes Francisco Camps, quien, además de esta causa, tiene abiertas otras dos en los juzgados valencianos, una por posibles irregularidades en la visita del papa a Valencia en 2006 y otra por las adjudicaciones del circuito de Fórmula Uno en el llamado caso Valmor.