pleno extraordinario sobre la situación de la ciudad

El estado de Alicante: PP y Cs defienden su gestión de la crisis y piden apoyo a las cuentas postcovid 

12/11/2020 - 

ALICANTE. El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Alicante (PP y Cs) y los cuatro grupos que conforman la oposición (PSOE, Unides Podem, Compromís y Vox) han celebrado este jueves el pleno extraordinario sobre el debate del estado de la ciudad con el acento puesto en la crisis sanitaria provocada por el coronavirus y la respuesta con la que debe enfrentarse desde la administración más próxima a los ciudadanos. 

Eso sí, durante la sesión, que se ha prolongado durante tres horas y media, ninguna de las formaciones ha profundizado en las soluciones que deben adoptarse. Tampoco se han realizado grandes anuncios, como sí ha sucedido en otras ediciones del debate desarrolladas en los últimos tres años. Básicamente, el bipartito compuesto por PP y Cs se ha limitado a defender la puesta en marcha de diversas obras de reurbanización en barrios por valor de 25 millones, así como la actuación desplegada prácticamente desde finales del mes de febrero con la intención de "proteger a los ciudadanos" frente a las necesidades generadas por la irrupción del coronavirus. Después, el propio alcalde, Luis Barcala (PP), ha solicitado respaldo a las cuatro fuerzas opositoras para "trabajar juntos" con el objetivo de que se puedan aprobar los próximos presupuestos municipales de 2021, en el que deben incorporarse las 105 medidas pactadas con asociaciones empresariales y entidades sociales en la comisión por la recuperación de Alicante, el pasado julio.

Lo cierto es que, los representantes de PSOE, Unides Podem y Compromís también se han mostrado dispuestos a negociar con el planteamiento de algunos ejes estratégicos en los que se debería poner el foco. Pero eso no ha impedido que los representantes de los seis partidos se hayan enzarzado en un cruce de ataques y críticas recíprocos, con peticiones de dimisión dirigidas hacia el primer edil, como ha venido sucediendo en los debates sobre el estado de la ciudad celebrados en los últimos años. Todo, en un desenlace con intervenciones poco habituales, como la protagonizada por el portavoz socialista, Paco Sanguino, que se ha saldado con la reprimenda del primer edil, quien ha llegado a asegurar que el debate había sido "decepcionante". 

Por partes. En primer término, ha sido el propio Barcala, encargado de abrir el debate, quien ha sostenido que la crisis sanitaria obligó al equipo de Gobierno a modificar el orden de prioridades planificadas inicialmente y forzó a adoptar un paquete de medidas para atender las nuevas necesidades que acuciaron a los ciudadanos y al conjunto del tejido productivo de la ciudad incluso desde antes de que se acordase el confinamiento domiciliario. En este sentido, se ha referido a decisiones como el cierre de parques, jardines y playas; al refuerzo del sistema de limpieza para intensificar la labor de desinfección en puntos especialmente sensibles; la puesta en marcha a pleno rendimiento del Centro de Acogida de Inserción (CAI) de personas sin hogar y el acondicionamiento del pabellón de Florida-Babel para acoger a otras 140 plazas; la creación de la Oficina de Emergencia Social (Omes) para canalizar las ayudas económicas y de acceso a productos de primera necesidad, como la distribución de alimentos, o a la puesta en marcha de una línea de subvenciones a pymes y autónomos por un importe de cinco millones, que se ha ampliado ahora en otro millón adicional de manera específica para los sectores del comercio y la hostelería.

En su conjunto, según ha destacado, se habrían movilizado ayudas por valor de 15 millones en esos dos ejes de atención a las personas y a las empresas más afectadas por el impacto de la crisis. Además, también se ha referido al refuerzo de la labor de la Policía Local, a la decisión de facilitar el transporte público gratuito en autobús para favorecer la movilidad para garantizar ese servicio en cuanto se pudo recuperar los desplazamientos al trabajo, o las bonificaciones y aplazamientos fiscales para el sector de la hostelería, entre otras medidas.

Después, ha concretado las obras de renovación de la escena urbana o de recuperación patrimonial que ya se están comenzando a ejecutar en barrios como Rabasa, San Gabriel o El Pla, en el Castillo del Tossal y en el de Santa Bárbara, y ha asegurado que desde la Oficina de Atracción de Inversiones de la Agencia Local de Desarrollo, se ha conseguido canalizar hasta 14 propuestas empresariales que se tramitarán como proyectos prioritarios y que supondrán inversiones por 60 millones, además de la creación de 400 puestos de trabajo. 

BARCALA PONE EN VALOR LOS PROYECTOS DE REURBANIZACIÓN EN BARRIOS Y OBRAS DE RECUPERACIÓN DEL PATRIMONIO POR VALOR DE 25 MILLONES Y DESTACA QUE SE SEGUIRÁ TRABAJANDO EN PROYECTOS COMO EL CENTRO DE CONGRESOS O EL NUEVO PGOU

Igualmente, se ha referido a otra serie de acuerdos adoptados a lo largo de este último año pese a la incidencia de la crisis sanitaria, como la aprobación del catálogo de protecciones, la implantación de la llamada Zona 30, la aprobación de la ordenanza reguladora de los patinetes eléctricos o el proyecto de normativa (pendiente de debate en pleno) que trata de regular las condiciones de convivencia de la ciudadanía, que ha defendido como necesaria para "poner fin a las mafias de la prostitución y la mendicidad" frente a las críticas y "la demagogia barata de la izquierda".

Por último, en esa primera intervención, se ha referido a las líneas de futuro para asegurar que se debe trabajar en el desarrollo de las iniciativas consensuadas y "aprobadas por unanimidad" en la comisión por la recuperación, mediante la constitución de una alianza entre la sociedad civil y el apoyo de la colaboración público-privada, bajo el soporte de la estabilidad institucional que, según ha dicho, procura la unidad del pacto de gobierno suscrito en junio de 2019 entre PP y Cs. 

Todo, según ha sostenido, pese a la adversidad que, en su opinión, ha supuesto que el ayuntamiento "se haya encontrado solo" sin apoyo del Gobierno central y del Consell en la adopción de esas primeras medidas de urgencia. De ahí que haya instado a los grupos de la oposición a dejar las siglas atrás para reivindicar mejoras en los presupuestos nacionales y autonómicos para atajar "los agravios" en la llegada de inversiones a la ciudad de Alicante.

Así, al margen de asegurar que se mantendría la hoja de ruta trazada en virtud del pacto suscrito entre PP y Cs, y de que se seguiría impulsando proyectos "fundamentales para la ciudad" como la construcción de un centro de congresos o la redacción del nuevo Plan General (ya comprometidos en el debate de 2019), ha invitado a los grupos de la oposición a favorecer la aprobación de los próximos presupuestos, formulando aportaciones, para que se puedan llevar a cabo ese paquete de 105 medidas concertadas con la sociedad civil, el pasado julio.

Los grupos de la oposición, por su parte, han puesto el acento en los errores del bipartito y la inacción en determinadas parcelas, con ataques dirigidos especialmente sobre la edil de Acción Social, Julia Llopis (PP), o sobre el edil de Cultura, Antonio Manresa (Cs). En primer término, Vox ha recriminado al bipartito el gasto destinado a las áreas de cooperación internacional, inmigración o igualdad y ha exigido un refuerzo de la seguridad. El portavoz de Compromís, Natxo Bellido, ha defendido que el balance del bipartito era "pobre" y ha señalado que Barcala, "más que un alcalde, ha demostrado que sería un buen diputado en el Congreso o en las Cortes" por su empeño en hacer oposición al Ejecutivo central y al Botànic, para afear el retraso en la contratación de servicios municipales, por ejemplo. Además, ha llegado a plantear algunas propuestas de acuerdo concretas, ya en el turno de réplica, relacionadas con el estímulo de la vivienda de alquiler, por ejemplo.

El líder de Unides Podem, Xavier López, ha acusado al bipartito de agrandar la brecha social en la ciudad y de gobernar para una minoría sin ofrecer alternativas a la empleabilidad y al desarrollo económico más que la de "continuar con el sector turístico que ya mostraba síntomas de agotamiento antes del coronavirus". Así, en su intervención ha llegado a solicitar la marcha del primer edil tras considerarlo "un lastre". La portavoz de Cs y vicealcaldesa, Mari Carmen Sánchez, se ha centrado en la defensa de la labor desarrollada las concejalías bajo responsabilidad de su partido (con especial acento en el Urbanismo respecto a la aprobación del catálogo y la agilización de licencias), o el Turismo (con la puesta en marcha de protocolos sanitarios específicos para el sector y el desarrollo de campañas de promoción que han permitido que el 95% de los hoteles de la ciudad permaneciesen abiertos) y ha defendido la vigencia del acuerdo político con el PP.

La portavoz de los populares, Mari Carmen de España, ha abundado en la exposición de Barcala, para detenerse en la apuesta por la estrategia Alicante Futura como estrategia para fomentar la diversificación económica con la atracción de empresas innovadoras y de base digital. Además, ha emplazado a la oposición a reivindicar inversiones para Alicante y dejar de ejercer una labor destructiva.

PSOE, Unides Podem y Compromís reprochan inacción al bipartito, aseguran que ha fracasado y piden la marcha del alcalde al dedicarse a ejercer como jefe de la oposición al Ejecutivo central y al Consell

Por último, el portavoz del PSOE, Paco Sanguino, también ha puesto énfasis en "los errores" del bipartito hasta el punto de sostener que había fracasado tanto en la respuesta a la crisis social, en la puesta en marcha de medidas económicas y en la aplicación de una correcta gobernanza. Así, ha considerado que no se procuró una rápida cobertura a las ayudas sociales, que se carece de ideas para dinamizar la economía "al margen de eso de Alicante Futura" y que no ha tenido en cuenta la participación ciudadana en la toma de decisiones, además de reprochar su falta de transparencia y el bloqueo de las iniciativas políticas de la oposición. Por último, en el turno de réplica ha esbozado los "líos" del bipartito, entre los que ha enumerado la reprobación a Sánchez y Llopis, la contratación de asesores, las coacciones al comercio y la hostelería o la difusión de bulos, en una de las intervenciones más atípicas de toda la sesión, caracterizada por la ironía y la "sorna alicantina", como ha subrayado el propio Sanguino.

El encargado de cerrar el debate ha sido el primer edil, quien ha considerado que el debate había sido "decepcionante" y que "nadie podía estar satisfecho" por su desarrollo. En esta línea, ha reprochado la falta de propuestas y de iniciativas por parte de los grupos de la oposición. "No han planteado medidas porque lo que se debía hacer ya lo habíamos hecho, como saben porque han estado informados en las reuniones de portavoces que hemos celebrado", ha asegurado. Así, ha lamentado que la sesión se haya centrado en los "ataques personales" hacía él o hacia la edil Llopis, en lugar de centrarse en "lo que le importa a los ciudadanos" y ha lamentado, especialmente, la intervención del portavoz socialista al considerarla propia "del club de la comedia". "Parece que usted olvida de que representa al PSOE y a los alicantinos que le han elegido y aquí se viene a plantear propuestas que mejoren sus condiciones, no a presentar un documento en un papel del que los ciudadanos no van enterarse", ha señalado, en alusión a la entrega de un listado con una veintena de propuestas que Sanguino ha facilitado a las portavoces de PP y Cs como cierre de su turno de palabra.

En esa última intervención de cierre, se ha producido el que podría considerarse el único anuncio de todo el debate: Barcala ha avanzado su intención de levantar los reparos del interventor municipal para que se pueda licitar los proyectos de construcción del nuevo colegio El Somni, así como el conjunto de los centros incluidos en el Plan Edificant.


(((ESTE DIARIO PUBLICARÁ MAÑANA UN ANÁLISIS SOBRE EL DESARROLLO DEL DEBATE))) 

Noticias relacionadas