Elías Taño vuelve a pintar su mural sobre el ‘caso Alsasua’ (Fotos: EVA MÁÑEZ)
Elías Taño vuelve a pintar su mural sobre el ‘caso Alsasua’ (Fotos: EVA MÁÑEZ)
Elías Taño vuelve a pintar su mural sobre el ‘caso Alsasua’ (Fotos: EVA MÁÑEZ)
Cs presenta una moción de urgencia contra el mural | Covite traslada su malestar a Ribó y Oltra
VALÈNCIA. Visto y no visto. El ilustrador Elías Taño impulsó este domingo una jornada para pintar un mural sobre el ‘caso Alsasua’. Para repintar, mejor dicho. En dos ocasiones lo ha hecho anteriormente. El primero fue borrado por los servicios de limpieza municipales –tras la alerta de un vecino-, en València; el segundo, en Sagunt, llegó al pleno del consistorio, que acordó eliminar el mismo. Este tercer intento, en el muro del solar de Jesuitas, apenas ha durado unas horas, pues el mismo lunes ha despertado con pintura blanca que tapa el mensaje del mural: ‘Llibertat joves d’Altsasu’. Con esta obra, Taño criticaba la reciente sentencia que condenaba a cuatro jóvenes de Alsasua (Navarra) a entre 9 y 13 años de cárcel por delitos de atentado a agentes de la autoridad, lesiones, desórdenes públicos y amenazas.
La sentencia del caso fue criticada por distintos sectores de la sociedad, que la vieron sobredimensionada, lo que derivó en una multitudinaria manifestación en las calles de Pamplona. “No se está pidiendo de ninguna de las maneras impunidad pero sí proporcionalidad”, declaró la presidenta del Gobierno de Navarra, Uxue Barkos. Este es el contexto en el que Elías Taño puso en marcha lo que, a la postre, se ha convertido en una serie de murales que, también, ha resultado en un debate sobre la libertad de expresión. "Para todo lo que sale del consenso, hay un límite”, expresaba el propio Taño a Cultur Plaza tras haber sido borrado su primer mural sobre el ‘caso Alsasua’.
En el caso de Sagunt el contenido llegó al Ayuntamiento llevando a una votación en el pleno que derivó en la aprobación de su borrado, algo que podría darse en València. De esta forma, el grupo municipal Ciudadanos presentará una moción de urgencia al pleno, que se celebrará el próximo jueves, para solicitar que se eliminen las partes del mural que “ensalzan” a los condenados por agresión. “Este tipo de acciones, incitan a la violencia y al odio y los valencianos no somos así. Si Ribó respalda este tipo de actos, que le pinten un cuadro y se lo cuelgue en su casa, pero los valencianos no tenemos por qué permitir que en las calles de Valencia se pinten impunemente murales que atacan a las víctimas y defienden a los agresores”, expresa el portavoz de Cs, Fernando Giner.
“Es intolerable que el Ayuntamiento de Valencia respalde alegatos sobre actos violentos. Recordemos que de este caso existe además una sentencia judicial firme. Es un auténtico despropósito que Joan Ribó facilite un muro público, de la ciudad de Valencia, para la pintura de un mural en defensa de agresores”, continuó Giner, quien ha demandado la eliminación inmediata del mural. Efectivamente, fue el propio ayuntamiento el que cedió un espacio con el objetivo de que Taño pintara de nuevo tras haber sido borrado su primer trabajo. En este momento, el consistorio explicó que el borrado se debió a un error de protocolo de la empresa concesionaria del servicio de limpieza, que debe consultar antes de borrar cualquier representación susceptible de ser considerada obra artística.
“Sabemos perfectamente que el arte urbano es efímero, pero no hace falta que sea tan efímero y menos porque no esté garantizado el buen funcionamiento del protocolo marcado por el Ayuntamiento”, reflejó entonces la concejala de Compromís Pilar Soriano. Con ello, desde el gobierno municipal se ofreció a Taño un ‘muro blanco’ con el fin de que pudiera llevar a cabo de nuevo su mural. "El gobierno municipal entiende el arte de calle como una rama más del arte y no solo la favorece, sino que lo ha promovido desde diferentes delegaciones", añadió entonces Soriano. Como en el caso de Sagunt, también este nuevo mural se ha topado con las críticas del Colectivo de Víctimas del Terrorismo, Covite, quien ha emitido una carta tanto al alcalde de València, Joan Ribó, como a la consellera de Igualdad y Política Inclusiva de la Generalitat, Mónica Oltra, criticando la mencionada cesión de espacio.
El colectivo considera “muy grave” que las instituciones públicas se muestren “a favor de unas personas condenadas por la Audiencia Nacional por una agresión cuya gravedad ha quedado demostrada”, tal y como reflejan en un comunicado. “Las supuestas discrepancias con una sentencia judicial no pueden ser la coartada para lanzar mensajes que inciten al odio, a la impunidad de la violencia y que apoyen a los agresores de cuatro personas a las que nadie prestó ayuda en medio de un linchamiento público […] Que una institución pública esté dispuesta a financiar y a promover este tipo de mensajes demuestra una total falta de solidaridad con las víctimas y supone un ataque contra los valores más básicos de la democracia”, concluyen desde Covite.