SEVILLA. El Valencia es el nuevo campeón de la Copa del Rey tras derrota por 1-2 al FC Barcelona gracias a los goles de Gameiro y Rodrigo. Messi recortó distancias en el segundo tiempo y pese al empuje azulgrana, los de Marcelino lograron resistir una vez más para firmar una temporada histórica. Con este título, el Valencia ya tiene ocho Copas en sus vitrinas.
La final comenzó como se preveía. El FC Barcelona se hizo con el control y el Valencia esperaba en bloque bajo a la espera de un contragolpe o un error. Apareció lo segundo con un clamoroso fallo de Lenglet y los de Marcelino acariciaron el primer gol a los cinco minutos. Rodrigo se quedó solo ante Cillessen, pero desaprovechó el regalo. Tras driblar al guardameta, remató a la red pero ahí emergió Piqué para evitar el tanto sobre la línea. La respuesta fue de Messi, la gran amenaza. Trazó una buena jugada individual y su disparo pasó cerca de la meta defendida por Jaume.
El éxtasis llegó a los veinte minutos. Gayà buscó el espacio por la banda y tras recibir se la entregó a Gameiro. El francés recortó a Jordi Alba en la frontal y fusiló a Cillessen. El valencianismo soñaba con un título once años después. Menudo Centenario. Más de medio Villamarín entonaba el ‘sí se puede’ tras el 0-1. Aún así, todavía quedaba mucha tela por cortar. Al menos eso decidió Carlos Soler. El ‘8’ valencianista hizo una galopada para el recuerdo. Superando a un velocista como Jordi Alba. Centró con fuerza y esta vez sí, Rodrigo no falló para hacer el 0-2. Al Valencia no se le podía escapar el título con un Parejo bailando un tango cada vez que tocaba el balón.
El Barça estaba muy espeso, sin referencia arriba apenas tenía ideas para superar el muro del Valencia, solo dos tímidos acercamientos de Rakitic fueron de lo poco reseñable del ataque catalán en la primera mitad. Al filo del descanso, fue cuando tuvo que intervenir Jaume con un paradón a disparo de Messi para retener la ventaja de dos goles.
Tras la reanudación, Valverde movió piezas desde el banquillo en busca de la remontada. Vidal y Malcom entraron por unos desacertados Arthur y Nelson Semedo. Quedaban 45 minutos para resistir y volver a saborear un trofeo once años después. Las sensaciones seguían siendo buenas, más enchufado el equipo blanquinegro. Guedes se fue hacia el centro y su disparo casi sorprende a Cillessen.
El susto de verdad llegó en el 55. Messi se internó en el área y con el exterior estrelló el balón en la cruceta. El rechace lo mandó a las nubes Arturo Vidal ante una parroquia valencianista que respiraba aliviada. Las peores noticias fue la retirada de un Parejo fundido por las molestias. Ovación tremenda para el capitán. Marcelino tuvo que recurrir a Kondogbia en su lugar.
A falta de veinte minutos, el Barça arriesgaba con Piqué de delantero, que pudo recortar distancias desde el punto de penalti. Su tiro se marchó fuera por poco. Sí que lo hizo acto seguido a balón parado. Messi cazó un rechace tras un cabezazo de Vidal y ponía el 1-2. Todavía había mucho que sufrir para agarrar la Copa del Rey. La pérdida de Parejo hizo mucho daño al Valencia, que apenas lograba retener el esférico.
Finalmente, el Valencia logró resistir el empuje y conquista su octava Copa del Rey. Un título para culminar la celebración del centenario.