VALÈNCIA. El Ministerio de Hacienda parece haber asimilado definitivamente la existencia de una partida ficticia de 1.325 millones de euros en el presupuesto de ingresos de la Generalitat valenciana. Eso, o que tiene un plan para que la Comunitat Valenciana reciba este año esos 1.325 millones no previstos y reivindicados año tras año, primero por el Gobierno de Alberto Fabra -como anticipo del Fondo de Competitividad- y desde 2016 por el de Ximo Puig como partida "reivindicativa".
Así se desprende del preceptivo Informe sobre los Presupuestos Generales de las Comunidades Autónomas que como cada año ha elaborado el Ministerio de Hacienda. En el de 2020, por primera vez, no hay mención alguna a la importante diferencia entre los ingresos provenientes del Estado previstos por la Generalitat y los previstos por el Gobierno Central en los Presupuestos Generales del Estado.
Cabe recordar que el pasado mes de octubre la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, se mostró comprensiva con la treta del Consell, sin llegar a justificarla. "No lo justifico pero puedo comprender que tiene una razón de ser", afirmó en València. Según explicó, dado que en el actual sistema de financiación "tiene un tratamiento especialmente lesivo la Comunidad Valenciana y que hay un diferencial de ingresos muy importante con la media del resto de Comunidades Autónomas, desde hace algún tiempo se incorporó esa suerte de colchón presupuestario que permitiera que ese déficit que no se diferencia entre CCAA estuviera ahí reflejado".
El informe sí contiene, como también es habitual, dudas sobre las previsiones de ingresos y gastos de la Generalitat en los Presupuestos de 2020, aunque menos que en los del año pasado, cuando la Generalitat infló diferentes partidas para cuadrar unas cuentas con un fuerte aumento de gasto del 10,81%.
Concretamente, la Secretaría General de Financiación Autonómica y Local, autora del informe, señala la previsión de ingresos por el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados que, a la vista de los datos de ejecución del ejercicio pasado, podría no alcanzarse pese a haberse reducido un 8,97% respecto a la previsión de 2019, hasta 32,88 millones de euros.
Lo mismo destaca respecto al Impuesto sobre Determinados Medios de Transporte, que se incrementa este año en 7,68 millones, un 15,29%. "Cabría apreciar posibles desviaciones en este impuesto a fin del ejercicio 2020, atendiendo a los datos disponibles de ejecución presupuestaria del año 2019", afirma.
En el capítulo de gastos, como es tradicional, la Conselleria que dirige Vicent Soler presupuesta el gasto farmacéutico por debajo del gasto real del año anterior, lo que hace ilusoria esta importante partida. En 2020, para más inri, la Generalitat repite el importe presupuestado el año anterior -1.145 millones-, lo que unido a la imposibilidad de dejar de comprar fármacos, convierte esta partida en claramente deficitaria. "Podrían producirse desviaciones con respecto a las dotaciones presupuestarias previstas para 2020", expresa el Ministerio en su diplomático lenguaje.
Hacienda destaca también el hecho de que los ingresos previstos por liquidaciones pendientes de los contratos de las concesionarias de hospitales públicos han pasado de 255 millones en 2019 -que no se alcanzaron- a 83, además de haber cambiado de capítulo.