VALÈNCIA. La Comunitat Valenciana se demuestra de extremos por lo que respecta a la transparencia de sus museos. Por cuarto año la Fundación Compromiso y Transparencia elabora el informe A través del espejo en torno transparencia y buen gobierno de los museos de bellas artes y arte contemporáneo durante 2016, un estudio que rinde cuentas de la gestión de hasta sesenta museos de toda España. Del total, cinco de los centros expositivos analizados corresponden a la Comunitat, espacios que presentan resultados bien dispares. Si bien, solo el Insititut Valencià d’Art Modern (IVAM) se cuela entre los museos más transparentes del país, con 18 puntos sobre 24, consiguiendo la tercera mejor nota, posición que comparte con el Museo Nacional d’Art de Catalunya (MNAC). Ocupan la primera posición, compartida con 20 puntos, el Artium Centro-Museo Vasco de Arte Contemporáneo, el Museo Guggenheim Bilbao y el Museo Lázaro Galdiano.
Estos son algunos de los museos calificados por el informe como transparentes, que este año se han duplicado con respecto al año pasado, incrementándose de cinco a diez. Si bien, el jarro de agua fría llega con el resto de centros valencianos analizados por el informe, todos calificados como opacos. Así, el Museu d’Art Contemporani Vicente Aguilera Cerni (MACVAC); el Museu de Belles Arts de València y el Museo de Arte Contemporáneo de Alicante (MACA) ocupan algunas de las últimas plazas al cumplir seis indicadores de los veinticuatro, siendo el peor parado el Museo de la Universidad de Alicante (MUA), con tan solo cuatro puntos. Del IVAM destaca el informe que publica la información económica actualizada, siendo esta un área en la que se ha mejorado en general, habiendo los museos españoles aumentado su transparencia en prácticamente todas las áreas analizadas.
“Aunque los resultados del informe no permiten identificar patrones comunes ni extraer conclusiones muy tajantes, lo cierto es que todos los museos incluidos en la categoría de transparentes disfrutan de amplios márgenes de autonomía en su gestión”, reza el informe, siendo del total de museos estudiados diecisiete privados y, el resto, públicos. Según el informe A través del espejo, el IVAM ‘pinchaba’ por lo que respecta a la definición de la misión, actos de disposición, información sobre el órgano de gobierno o asumir un código de buenas prácticas. Por contra, la mayoría de aspectos positivos lo han situado en lo alto de la tabla como uno de los museos más transparentes, situándose en el primer de los tres grupos en los que, depende de la puntuación, se distribuyen los museos. Después de los transparentes se encuentra el grupo de los translucidos, un paso intermedio que no cuenta con representación valenciana, y finalmente el apartado de los museos opacos, que aglutina a los otros cuatro estudiados por el estudio.
De igual forma, del total de veinticuatro asignaturas cuatro quedan pendientes para los cinco centros valencianos que aparecen en el informe, estando todos suspendidos por lo que respecta a la transparencia en: las decisiones que afectan a la incorporación y salida de los objetos integrantes de la colección del museo, decisiones que “no pueden dejarse al arbitrio del director, sino que deben explicitarse en un documento que recoja los principales criterios y condiciones que deben tenerse en cuenta”; también se considera, a pesar de haber impulsado la conselleria el código de Buenas Prácticas, que los museos no han hecho público su código de buen gobierno o su adhesión a un código de buen gobierno referente en el sector; tampoco informan sobre el grado de cumplimiento de los objetivos fijados para sus principales actividades/departamentos ni se publica información sobre el número de visitas anuales, desglosadas por meses, sedes, actividades, conceptos y grado de satisfacción por parte del público.
A partir del próximo año, la Fundación Compromiso y Transparencia incluirá un nuevo indicador que exigirá la elaboración y publicación de un informe de responsabilidad social o sostenibilidad. En concreto, pedirá que el museo haga público en un lugar visible de su web un informe que deberá realizar un análisis de materialidad identificando los temas relevantes, desarrollar los canales de diálogo con los distintos grupos de interés y proporcionar información sobre el cumplimiento de objetivos y metas. Este informe termina con siete recomendaciones generales a los museos: revisar y mejorar la formulación de la misión; fortalecer los órganos de gobierno; reforzar el foco estratégico; mejorar la calidad de la información de las memorias anuales; informar con transparencia del origen y destino de los fondos; desarrollar políticas sobre la gestión de la colección; y medir y evaluar el impacto de las actividades.