EL CAMPELLO. Todos los años, coincidiendo con la celebración de la Semana de la Salud, la comunidad escolar del colegio público Rafael Altamira de El Campello (familias, alumnos y profesorado) participa en una colecta solidaria de alimentos con destino a Cáritas, con los que la organización humanitaria llena las despensas de decenas de familias vulnerables del municipio.
Este año, pese a la pandemia y la suspensión del acto principal (una carrera), se han superado todas las previsiones y el centro ha recogido cientos de kilos que ayer llegaron a las estanterías de Cáritas. El grupo estuvo integrado por la directora, Inmaculada Aracil; la profesora Rosa y la secretaria del centro, Loreto, quien se encargó de organizar el operativo que acabó con un camión lleno de comida. Hasta el centro se desplazaron los responsables de Cáritas, con el párroco Don Luis a la cabeza.
“En las circunstancias actuales hay que agradecer a las familias el apoyo recibido, porque hay muchas familias que lo pasan mal y es momento de colaborar”, señala la directora.