La mítica serie británica acaba de emitir el episodio rodado el pasado mes de julio en Valencia. Su argumento contiene jugosos homenajes subliminales para los espectadores valencianos
VALÈNCIA. “Mira ese edificio. Míralo”, dice El Doctor (Peter Capaldi) a su nueva compañera, Bill Potts (Pearl Mackie), mientras contemplan la Ciudad de las Artes y las Ciencias convertida en un escenario futurista durante el segundo episodio de la recién estrenada décima temporada de Doctor Who. “¿Sabes lo que me gusta de la humanidad? El optimismo. ¿Sabes de qué está hecho este edificio? De puro, elevado optimismo”.
Imposible no reaccionar a este diálogo con una risa inconsciente. La mente del espectador valenciano, que conoce el origen y el proceso de construcción del famoso conjunto arquitectónico en tiempos de euforia, Fórmula 1 y demás burbujas, interpreta mejor que nadie el afilado homenaje.
“¡Sonríe!” es el título del episodio. El Doctor y su compañera viajan al futuro, a una de las primeras colonias de la Tierra. El conjunto arquitectónico se encuentra rodeado de un inmenso campo de trigo y un cachito de mar. Ha sido retocado en postproducción para no ser exactamente igual al real, porque, ojo, no estamos en Valencia sino en cualquier lugar ficticio del universo. Unos robots llamados Vardys, que hablan emoji, habitan la colonia. Fueron programados para hacer la vida más agradable a los humanos, pero en un momento dado se les cruzaron los cables e interpretaron que debían erradicar cualquier atisbo de tristeza. Desde entonces se dedican a eliminar a cualquier infeliz. Y claro, ya no queda prácticamente nadie.
“¿No me digas que hemos cruzado medio universo y que todo el mundo se ha ido?”, se pregunta Bill al ver el mastodonte vacío. “Tengo un impulso verdaderamente infantil de hacerlo volar por los aires”, afirma El Doctor al entender el motivo de la falta de población. La maquinaria de los dobles sentidos vuelve a ponerse en funcionamiento. El Doctor manifiesta su furia contra el edificio, y, como ya imaginó la banda valenciana Los Radiadores en su videoclip No me achantaré, quiere verlo arder. Su existencia no ha provocado más que enormes calamidades.
El final del episodio, por el contrario, conmueve. El Doctor recuerda la fábula del pescador y la pescadilla mágica. Un día, un pescador pescó una pescadilla mágica. La pescadilla le ofreció al pescador tres deseos a cambio de su vida. El pescador dijo, “me gustaría que mi hijo volviera a casa de la guerra y con 100 monedas de oro”. El hijo del pescador volvió de la guerra en un ataúd y el rey envió 100 monedas de oro en reconocimiento de su heroica muerte. Al pescador solo le quedaba ya un deseo. Tras el desastre provocado por los dos primeros, el tercero fue no haber hecho los dos primeros deseos. “De alguna manera apretó el botón de reinicio”, dice El Doctor.
“Bienvenidos a vuestro nuevo mundo. Conoced a los Vardy, la forma de vida indígena. Mejor que os hagáis amigos porque hay montones de ellos y son los únicos que saben cómo funciona todo”, recomienda El Doctor a uno de los pocos humanos supervivientes. Nuestra mente vuelve a viajar a la vida real, a esta etapa de cambios, de nuevo gobierno, de “nuevos mundos”. Solo El Doctor podría recomendar algo tan bonito: háganse amigos también de su enemigo “porque son un montón”. No se trata de apartarlos, sino de sacar lo mejor de cada uno, ya sea de la ideología o el carnet de uno, o no lo sea. Tal vez sea una utopía, pero resulta maravillosa escucharla.
Tal y como publicamos en Valencia Plaza en primicia, el pasado mes de julio la popular serie producida por la BBC sorprendió a los whovians, los fans de Doctor Who, al aparecer por sorpresa en Valencia. La enorme maquinaria de la BBC no ha pasado por alto el cálido recibimiento. Tanto Peter Capaldi como Pearl Mackie tuvieron un comportamiento ejemplar aquel día. Pacientemente se dejaron fotografiar y saludar por todos los que se acercaron al lugar de rodaje, y ahora la BBC ha publicado este saludo en forma de agradecimiento a la ciudad y a sus fans. Máxima elegancia y savoir faire por su parte hasta en el último detalle.
En esta décima temporada Pearl Mackie se estrena como nueva compañera. Y además como la primera compañera gay y de raza mixta del Doctor. “Es importante que salgan personas de distinta raza y de diferente orientación sexual, LGBT, etc., en programas de primera línea", afirmó la actriz en diversas entrevistas. “Cuando yo era pequeña y veía la tele nunca veía personas como yo”, refiriéndose al color de su piel.
Peter Capaldi, duodécimo Doctor de la saga, confirmó hace unos meses que no repetirá la temporada que viene. Se especula ya con diversos nombres para sustituirle, incluyéndose nombres como Mihacela Coel, lo que podría significar la primera vez que una actriz, además de raza negra, recoge el mítico papel.
Steven Moffat, showrunner de la serie, también abandona la temporada que viene, y será sustituido por Michael Chibnall, creador de Broadchurch.
Doctor Who es la serie de ciencia ficción más larga de la historia, con más de 800 capítulos desarrollados en 36 temporadas. El Doctor, un alien también llamado “señor del tiempo” (Time Lord), cada vez que es herido de gravedad cambia de apariencia, un recurso de guión que ha servido a sus creadores como excusa para cambiar a su actor principal cada determinado tiempo. El Doctor viaja en nave camuflada como una cabina de policía británica de los años 60: la Tardis, un nombre tan popular en Gran Bretaña que ha sido incluido en el Diccionario Oxford de la Lengua Británica. Doctor Who ha recorrido el tiempo y el espacio, encontrándose en diversas ocasiones con personajes relevantes de la historia. A lo largo de su historia ha tenido más de 50 acompañantes diferentes. El verdadero nombre del Doctor es un misterio.