ALICANTE. El pleno de la Diputación de Alicante sobre los presupuestos ha demostrado que el denominado Gobierno provincial; es decir, el equipo de gobierno tiene dos caras; la de su portavoz, Carlos Castillo, con una imagen de duro, combativo e inflexible y la del presidente, César Sánchez, que sería el reverso de la moneda, con un perfil más dialogante y conciliador, que huye de la confrontación dialéctica y que, de vez en cuando, tiene que corregir las decisiones o posicionamientos del propio portavoz.
La prueba se produjo en el pleno de presupuestos de este martes, cuando Sánchez tuvo que hacer de apagafuegos. Una vez terminada la ronda de intervenciones de Castillo, en las que ha respondido a las enmiendas de la oposición, muchas de ellas, centradas en la posibilidad de modificar las cuentas y constituir un fondo de cooperación para municipios, el presidente ha concluido la sesión con un mensaje para rebajar la tensión generada y abriendo la posibilidad a que ese fondo se ponga en marcha en 2018. Las palabras de Sánchez fueron así de sencillas, o de tajantes, según se mire: “Como presidente sigo abierto a negociar la posibilidad de participar en el año 2018 en este fondo. Vamos a estar en las mesas en las que se nos convoque para negociar los criterios de reparto y esperamos que se escuche los criterios de la Diputación y se alcance un consenso, que significa ceder a parte de las pretensiones que uno tiene y, desde luego, en los próximos meses vamos a ver qué voluntad de consenso tiene el Gobierno valenciano”, ha concluido el presidente, quien ha reiterado que “nosotros no vamos acerrar la puerta en ningún caso y estamos abiertos a negociar y a trabajar conjuntamente. Todos los intentos para ese objetivo los había paralizado Castillo.
El discurso de Sánchez dista mucho del tono ofrecido por Castillo minutos antes. Y sobre todo, en todo lo referido al fondo de cooperación municipal. Los tres grupos de la oposición -Esquerra Unida, Compromís y PSPV-PSOE- habían presentado enmiendas para que se constituyera ese fondo o que al menos se destinara una partida simbólica. Los socialistas son los que más se habían implicado a tal fin. Una vez, a través de una enmienda conjunta con Compromís y Esquerra Unida para liberar importes del presupuesto hasta conseguir los 13,7 millones de euros. Otra de las propuestas presentadas por el grupo socialista ha sido la de obtener los 13,7 millones del fondo para los municipios de diferentes planes provinciales, que recobrarían sus importes a través de un préstamo por el mismo importe. "Esta propuesta nos resulta también viable dado que puede ser cancelado con los fondos que provienen del remanente de tesorería”, según ha explicado el portavoz del PSPV José Chulvi. Los tres grupos de la oposición habían solicitado, incluso, un aplazamiento del pleno para que las enmiendas fueras estudiadas por los técnicos y que dieran su visto bueno a la viabilidad. Pero no, el PP no accedió. Según los tres portavoces de la oposición, "Castillo nos ha dicho que no iba aplazar nada pues ya tenía el respaldo del diputado no adscrito Fernando Sepulcre".
El PSPV, EU y Compromís han intentado por tres vías modificas las cuentas ante la inflexibilidad de pp
Y así empezó el pleno. Castillo ha defendido los presupuestos, en los mismos términos que ya hiciera en el pasado viernes 2 de diciembre. Ha reiterado en su intervención que los presupuestos para 2017 están "pensados en los intereses de la provincia, de los municipios y de los alicantinos," y que, condicionados por las limitaciones del techo de gasto, son "ambiciosos y realistas". Y de ahí, las limitaciones del techo de gasto, la negativa a admitir ninguna enmienda de la oposición para que ese fondo entre en vigor en 2017. Y después han comenzado las réplicas de los tres grupos de la oposición.
La primera, la de Esquerra Unida. La diputada Raquel Pérez ha hablado de presupuestos "clientelares", "parroquianos", "continuistas" y de compra de "voluntades políticas". Ha afirmado que 10 millones de euros son ayudas "con nombres y apellidos" para municipios del PP y ha recriminado que le hubiera gustado tener tiempo para "debatirlos y negociarlos". A lo que Carlos Castillo ha replicado que todas las subvenciones y su distribución están amparadas por la ley y que el "caciquismo" ha sido desterrado y pertenece tiempos pasados.
La segunda intervención ha sido la de Compromís y el tono de crispación ya se ha elevado. El portavoz de Compromís, Gerard Fullana, ha recriminado a Sánchez por "incumplir", según él, "todo lo que ha dicho" en lo que va de gestión. Fullana ha disparado contra Castillo del que considera que "debería dimitir" por haber propiciado "un incremento de las subvenciones nominales" y "multiplicar por cinco las asignaciones a los grupo políticos" de la Diputación. En su réplica, el portavoz del PP ha defendido la labor que la institución hace en la gestión de las competencias impropias -las que el PP sostiene que debería pagar la Generalitat-; es decir, en el Hogar Provincial y el Doctor Esquerdo. Ha afeado a los valencianistas por poner en peligro las inversiones y los puestos de trabajo de ambos centros. "Ustedes no quieren que se hagan las inversiones y que los enfermos mentales pasen frío en el Doctor Esquerdo", ha reprochado Castillo. A lo que Compromís ha saltado a la primera y ha acusado al popular usar a los enfermos mentales "como argumento para rechazar la propuesta a favor del fondo de cooperación local, algo que ha considerado una "vileza", en palabras de Fullana.
Compromís y Castillo se reprochan a los enfermos mentales en el debate sobre el fondo de cooperación
Por último, el socialista José Chulvi ha hecho un llamamiento directo a los diputados del PP para que aprobarán la inclusión de una partida para el fondo de cooperación. “Ustedes son alcaldes y concejales en sus respectivos pueblos y ciudades, y desde aquí tienen una oportunidad única para demostrar que su compromiso con el municipalismo es total y absoluto. Votar en contra de esta enmienda es votar en contra de los municipios de la provincia, o si lo prefieren, es votar a favor de discriminar a los alicantinos que verán como sus ayuntamientos reciben menos recursos que sus vecinos valencianos. Esta es la realidad”, ha incidido el portavoz socialista. Pues además de rechazarla, Castillo ha reprendido al portavoz socialista. "Usted tenía una enmienda inicial que el PP le iba aprobar con unos cambios y no ha querido negociarla porque no quiere pactos con el PP", ha reprochado Castillo. Chulvi no ha querido contestarle. Directamente ha recibido el mensaje conciliador del presidente Sánchez. Pues eso, lo dicho, las dos caras del PP: la combativa de Castillo y la pacificadora de Sánchez.
El reprende al PSPV por no querer pactar una enmienda corregida
Entretanto, Sepulcre ha agradecido al equipo de gobierno que le hayan sido aceptadas "ocho de las diecisiete enmiendas" que había presentado al proyecto presupuestario y ha calificado las cuentas de la corporación provincial de "responsables". Merced a su voto se han aprobado los presupuestos.