SAN VICENTE DEL RASPEIG. El portavoz de Ciudadanos (Cs), Pachi Pascual, ha recogido las quejas de los vecinos de las partidas rurales de San Vicente del Raspeig que alertan de la falta de iluminación en muchos caminos debido a la sustitución de las antiguas farolas por parte del equipo de Gobierno. Pascual ha explicado que "lejos de mejorar el alumbrado, los vecinos nos hacen llegar su indignación porque las nuevas farolas iluminan poco, hay menos cantidad y mayor distancia entre ellas".
Las quejas de los vecinos son generalizadas desde hace meses en aquellas zonas donde se está llevando a cabo el proyecto de sustitución de las antiguas farolas, entre las que se encuentran Sol y Luz, la partida Toregroses, Boqueres o Pozo San Antonio. Los problemas afectan a multitud de caminos, como el camí de la Lloma Alta, Ras del Bonyigo, Les Coves, La Baiona y muchos otros.
Cs ha comprobado, junto a los vecinos, "todos los problemas de inseguridad que este proyecto de sustitución de farolas está provocando, ya que hay tramos absolutamente a oscuras, incluso donde están situados los contenedores de basura, lo que sin duda supone un riesgo de atropello para los peatones y también para los conductores que circulan por la zona".
El portavoz de Cs ha afirmado no entender "cómo es posible que una actuación que en principio sería positiva, como es sustituir unas farolas antiguas por otras solares, se está convirtiendo en un problema para los vecinos, que ven cómo los caminos están peor iluminados que antes sin que el equipo de Gobierno les dé una explicación coherente de ello".
Pascual vuelve a " exigir al equipo de Gobierno que escuche las quejas de los vecinos, que finalice de una vez por todas la instalación de las nuevas farolas que acumula un retraso considerable y, sobre todo, que haga una evaluación de este proyecto para que los vecinos de las partidas rurales y urbanizaciones de San Vicente reciban el servicio de alumbrado público que merecen".
A raíz de las quejas de los vecinos, el portavoz de Ciudadanos ya preguntó por este asunto al equipo de Gobierno en el pleno del pasado mes de diciembre y la concejala de Servicios Urbanos, Pilar Alcolea, reconoció que las obras de sustitución de las farolas, que comenzaron en julio, se paralizaron por un corte en el abastecimiento de material electrónico por la pandemia. La edil socialista aseguró que estaba previsto que las obras finalizaran el 24 de enero de 2021, pero el proyecto sigue inacabado.
"Sin embargo, a día de hoy son muchos los vecinos que continúan haciéndonos llegar su indignación porque las nuevas farolas no están en funcionamiento, algunas apenas iluminan y porque se han generado nuevas zonas de penumbra en lugares donde antes de este proyecto había una mejor iluminación", concluye Pachi Pascual.
