MADRID (EP). Las pruebas para el consumo de drogas y de detección de enfermedades en humanos pronto podrían ser mucho más simples, gracias a la nueva investigación sueca. Aunque las pruebas de drogas actualmente se basan en muestras de sangre u orina, investigadores de la Universidad de Gotemburgo, en Suecia, han identificado un método de detección de drogas mediante el análisis de varios compuestos en el aliento exhalado.
En un artículo sobre su trabajo que se publica en Journal of Breath Research, estos investigadores demuestran cómo la recolección y el análisis de compuestos producidos externamente en el fluido de revestimiento de las vías respiratorias permite realizar pruebas y monitorizaciones no invasivos.
El autor principal, Göran Ljungkvist, explica: "El aliento exhalado contiene partículas que transportan sustancias no volátiles. Los principales componentes, lípidos y proteínas, se derivan del líquido del revestimiento del tracto respiratorio. El procedimiento de recolección no es invasivo y puede repetirse en poco tiempo. Sin embargo, la pequeña masa muestreada es un desafío analítico. No obstante, las partículas exhaladas son una nueva y prometedora matriz para el análisis de biomarcadores".
"Tomamos muestras de aliento de 13 sujetos que estaban en tratamiento con metadona, para explorar si las huellas de la droga podían detectarse a través de la respiración, en lugar de utilizar técnicas invasivas que alteran la integridad del sujeto. También queríamos descubrir el mejor método para recoger partículas de metadona en el aliento exhalado, por lo que nuestro estudio comparó dos métodos de muestreo diferentes: filtración con electreto e impactación".
El método de filtración con electreto potencialmente recogió partículas exhaladas de todos los tamaños, mientras que el basado en impactación recolectó partículas en el rango de tamaño de 0,5 a 7 micrómetros, conocidas por reflejar el fluido del revestimiento del tracto respiratorio de las vías respiratorias pequeñas. Los investigadores utilizaron cromatografía líquida-espectrometría de masas para analizar las muestras recopiladas, así como para investigar el impacto de diferentes patrones de respiración.
Sus resultados mostraron que la metadona estaba presente en todas las muestras con ambos métodos, pero cuando se utilizó el método basado en la impactación, la concentración de metadona en el aliento exhalado fue menor al 1 por ciento de la concentración recogida por el método basado en la filtración.
"La diferencia en las cantidades recolectadas de metadona entre los dos métodos fue enorme. Eso planteó preguntas secundarias sobre el origen de las partículas recogidas, posible contaminación del fluido oral, el patrón de respiración y finalmente el diseño del dispositivo de recolección", apunta Ljungkvist.
"El diseño del dispositivo es crucial en muchos sentidos y es probable que la enorme diferencia en las cantidades recogidas se explique mediante el muestreo de diferentes distribuciones de tamaños de partículas. El dispositivo basado en la filtración también recoge partículas más grandes no recopiladas por el método basado en la impactación El diseño también influye en el riesgo de contaminación del fluido oral y las pérdidas de partículas en su camino hacia el medio de recolección real", agrega.
Y continúa: "Sin embargo, creemos que la gran cantidad de metadona recogida por el método de filtración probablemente se deba a una contribución considerable de la metadona de las vías aéreas centrales o del tracto orofaríngeo. Nuestros resultados y métodos podrían tener implicaciones para el análisis de compuestos endógenos y exógenos en el aliento exhalado como biomarcadores de enfermedades sistémicas y pulmonares, así como en el desarrollo de nuevos enfoques para estudiar la exposición humana a la contaminación del aire".