VALÈNCIA. La diputada Pilar Lima dio este lunes un paso adelante para postularse como próxima líder de Podemos en la Comunitat Valenciana. Una maniobra que sorprendió a varios referentes del partido, sobre todo en el sector que capitanea la síndica parlamentaria, Naiara Davó, cuya intención era armar una candidatura única de consenso en torno a su figura.
Al margen del programa que pueda presentar Lima, uno de los puntos de apoyo que puede tener su candidatura es la afinidad de la que siempre ha hecho gala con el líder de Podemos, Pablo Iglesias. De hecho, además de ser senadora entre 2015 y 2019 y ahora diputada autonómica, formó parte del Consejo Ciudadano Estatal al estar incluida en la lista del máximo responsable de la formación morada.
En 2017, se presentó como candidata al proceso para convertirse en secretaria general de Podemos en la Comunitat Valenciana. Una lista que se consideró 'oficialista' al estar conformada por afines a Iglesias, mientras la encabezada por Fabiola Meco era la más cercana a Íñigo Errejón y la tercera en discordia y finalmente vencedora, fue la de Antonio Estañ, que aglutinó simpatías de varios sectores.
Así pues, puede decirse que Lima concentró el poder 'pablista' en aquellas primarias de 2017 en las que no logró la victoria. Ahora bien, ¿quién encabeza el 'pablismo' ahora en la Comunitat?
Una pregunta pertinente si en el proceso resultara clave -que no tiene por qué- cuál es la preferencia de Iglesias para liderar orgánicamente el proyecto en la Comunitat Valenciana. Ahora bien, la afinidad con el todopoderoso líder y vicepresidente del Gobierno de España no es exclusiva de Lima y su grupo.
La propia Naiara Davó, posible aspirante al cargo, ha estado integrada en el 'pablismo' en diferentes procesos y, de hecho, en 2017 formó parte -en el puesto número 15- de la lista de Lima. Bien es cierto que, posteriormente, acercó posiciones con el grupo del entonces secretario general, Antonio Estañ, si bien precisamente por ello su figura se ha considerado de consenso.
En esta línea, cabe recordar que el vicepresidente segundo del Consell y destacado miembro de Podem, Rubén Martínez Dalmau, también conoce a Iglesias desde muchos años atrás. De hecho, el ahora líder de la formación morada trabajó como investigador en la Fundación CEPS a partir de 2006, entrando posteriormente a la dirección de esta organización. Precisamente Martínez Dalmau, cofundador de CEPS en el 1993, era vicepresidente de la entidad en aquella etapa.
Un dato relevante si se tiene en cuenta que el vicepresidente del Consell ha mostrado públicamente su sintonía en relación a los pasos dados por Davó de cara a ser líder del partido. Una simpatía que transmitió este martes el propio Martínez Dalmau al ser preguntado por las formas y momento elegido por Lima para anunciar su intención de liderar el partido: "No podemos tener prisa para ir a ocupar las sillas", aseguró el vicepresidente, mostrando así su malestar por el sorpresivo paso adelante de la diputada.
Las palabras de Martínez Dalmau abundan en un pensamiento que circula no solo por la formación morada, sino también en los otros partidos del Botànic, PSPV y Compromís: la preocupación sobre cómo puede afectar al Gobierno valenciano un proceso interno lanzado a cuatro meses vista de que llegue la Asamblea Ciudadana Valenciana.
Sobre esto, distintas fuentes consultadas de estas formaciones, admitieron que el escenario perfecto para la estabilidad hubiera sido un proceso corto y sin sobresaltos en el partido morado. Algo que, salvo acuerdo de consenso con cierta celeridad, se antoja complicado en los próximos meses.