VALÈNCIA. El adelanto electoral impulsado por el socialista Pedro Sánchez ha obligado a todos los partidos a atender, entre otras cuestiones, la confección de las candidaturas al Congreso y Senado que se encontraban aparcadas debido a la inminente celebración de las elecciones locales y autonómicas. Una de las formaciones donde se perfilan variaciones importantes es el PPCV, dado que desde los comicios de 2016 hasta ahora se han producido profundos cambios en la formación de la gaviota.
Para empezar, el presidente ya no es Mariano Rajoy sino Pablo Casado. El ahora máximo responsable se impuso en primarias a Soraya Sáenz de Santamaría y María Dolores de Cospedal y muchos en el partido opinan que el nuevo líder dejará su impronta en las listas al Congreso especialmente en Valencia, limitando en cierta medida el espacio a los afines de la presidenta regional, Isabel Bonig.
Un hecho que en cierta medida podría considerarse lógico dado que varios de los componentes de la candidatura -algunos muy próximos a la líder regional- respaldaron a otros candidatos, especialmente a Sáenz de Santamaría. Un hecho que, unido a algunos rifirrafes -aunque al parecer ya reconducidos- entre el PPCV y la dirección nacional ocurridos en las últimas semanas, alimenta la idea de que Casado quiera evidenciar un mayor dominio en la lista.
Así, echando la vista atrás, en junio de 2016, la candidatura por Valencia que logró seis escaños estuvo encabezada por Elena Bastidas; mientras el 'número dos' fue para Belén Hoyo, el tercer lugar fue para Rubén Moreno, el cuarto para José María Chiquillo, el quinto para Juan Vicente Pérez y el sexto para Óscar Gamazo.
En este punto, existen dudas de que Bastidas, próxima a Bonig, repita en ese puesto, y distintas fuentes populares consideran que, en ese caso, habría más posibilidades de que Hoyo -con responsabilidades en el Congreso y una de las primeras dirigentes en España que apoyó a Casado- fuera aupada como cabeza de lista si no se produce algún fichaje externo. Además, Rubén Moreno fue el responsable de coordinar la campaña de Sáenz de Santamaría en la Comunitat, por lo que habrá que recalcular sus posibilidades de continuidad.
De la misma manera, el superviviente -exlíder de Unió Valenciana y con cargo en Senado o Congreso por el PP desde hace 15 años- José María Chiquillo también puede tener complicado ocupar un puesto de salida dado que no se significó por Casado. En esta línea, la continuidad de Juanvi Pérez también genera dudas por la falta de amarres en el nuevo escenario político. Por otro lado, el diputado gandiense Óscar Gamazo sí tiene mayores opciones de seguir incluso mejorando posiciones al estar bien valorado en Madrid y haber apoyado a Casado.
En cuanto a posibles entradas, suena con fuerza la incorporación a la lista del presidente de la Gestora del PP de València, Luis Santamaría, quien capitaneó la victoria de Casado en la capital durante las primarias y está bien considerado como diputado. Otras fuentes especulan con que el ex presidente provincial Vicente Betoret, que apoyó a Cospedal en el proceso, podría tener hueco dado que no parece prioritaria su inclusión en Les Corts para Bonig.
Con estos mimbres, las distintas fuentes del PP consultadas por este diario apuntan a que Casado situará al cabeza de lista por Valencia y elegirá algunos otros nombres en puestos de salida, dejando a Bonig la opción de 'salvar' a alguno de los dirigentes de su órbita o situar a alguno nuevo con el permiso de Génova. Por otro lado, en lo que se refiere al Senado, los representantes electos valencianos son Pedro Agramunt, Marta Torrado y Susana Camarero y todo apunta a una renovación como mínimo del primer puesto de la candidatura.