VALÈNCIA. El terremoto político ocasionado por la ruptura entre PP y Ciudadanos, primero en Murcia y después en Madrid, se coló este jueves en la sesión de control al president de la Generalitat, Ximo Puig. Los síndics de los dos partidos protagonistas, Isabel Bonig y Toni Cantó, no dejaron pasar la oportunidad de reconocer en sus intervenciones la gestión que se ha llevado a cabo tanto desde el gobierno de Madrid, así como de enfatizar que el pacto que populares y naranjas mantienen en Alicante no peligra.
Apenas subió al atril, la presidenta del PPCV acusó a los socialistas de "pensar en sus intereses y no en los de España, ni en la pandemia ni en la enorme crisis económica y social". "Todo táctica: elecciones en Catalunya, alianzas y agitar Murcia, Madrid y Castilla y León", señaló la síndica para más tarde ensalzar la "labor" que Ciudadanos y el Partido Popular hacen tanto en el Ayuntamiento de Alicante como en la Diputación y otros consistorios donde gobiernan conjuntamente, y defendió la estabilidad de la que goza este pacto.
"No voy a permitir que se ponga en duda y en cuestión la estabilidad política e institucional de la Diputación de Alicante, del ayuntamiento y de todos aquellos consistorios en los que gobernamos con Ciudadanos", expuso Bonig. Un alegato tras el que la portavoz de los populares apeló al sentido institucional de sus socios: "Apelo hoy a los buenos sentimientos, a la vocación de servicio público de los miembros de Ciudadanos, que con errores y aciertos estamos llevando a cabo una gran labor".
La intervención más esperada este jueves, sin embargo, era la de Cantó, dado que tras la sacudida del miércoles tan solo se manifestó en Twitter, donde advirtió que desconocía la decisión adoptada por su partido y solicitó una convocatoria de la ejecutiva. Una cita en la que previsiblemente solicitará la dimisión del vicesecretario primero de la formación, Carlos Cuadrado, tal y como avanzó este diario.
El líder de los naranjas comenzó su intervención citando las cifras de paro femenino en la Comunitat Valenciana y acto seguido sacó un gráfico para presumir de la evolución de los datos del paro en la Comunidad de Madrid, tras lo que hizo una pausa para recordar que "hasta ahora" era una autonomía donde cogobernaban junto al PP.
"Como decía Pío Cabanillas, señora Bonig, cuerpo a tierra que vienen los nuestros...", espetó el líder autonómico de Ciudadanos para lamentar el estado en el que actualmente se encuentran tanto su partido como el que preside Pablo Casado.
Tras este breve inciso, que de hecho fue el que más relevancia tomó, Cantó volvió a sacar un recorte de prensa para seguir con la sesión de control a Puig en el que podía leerse que la Comunidad de Madrid y la de Andalucía eran "las únicas que generan empleo en la segunda ola". Precisamente, en la primera cogobernaban y en la segunda siguen haciéndolo. Un gesto que sirvió de nuevo para sacar pecho de la gestión de los gobiernos de PP y Ciudadanos.
