ALICANTE. El Ayuntamiento de Alicante jugará el papel principal a la hora de evaluar el proyecto de instalación de seis depósitos para el almacenaje de combustible en los muelles 17 y 19 de la terminal de mercancías del Puerto. Será quien autorice o desestime los permisos de obra y de actividad que necesita la empresa impulsora de los depósitos (XC Business 90 SL), para lo que podrá elevar consulta a la Conselleria de Transición Ecológica (que asume las competencias sobre medio ambiente).
Así lo aseguraron, al menos, portavoces oficiales del departamento autonómico que coordina Mireia Mollá, al precisar que la ejecución del proyecto requiere solo de "licencia ambiental municipal", sin que resulte estrictamente necesaria la intervención de la conselleria. Eso sí, se emitirá un informe de evaluación -que no tendrá el rango de declaración de impacto ambiental- si el Ayuntamiento así lo solicita.
En cualquier caso, exista o no petición en ese sentido, según las mismas fuentes, la conselleria prestará especial atención al desarrollo del proyecto a la vista de la contestación institucional y social que generó desde que, el pasado mes de noviembre, trascendió la tramitación de la modificación sustancial de la concesión sobre los terrenos de la terminal de la que dispone la empresa Terminales Marítimas del Sureste (TMS).
En la misma línea, según precisaron portavoces de la Conselleria de Justicia, el departamento autonómico de gestión de Emergencias (ahora bajo la responsabilidad de Justicia, y no de Presidencia) tampoco tendrá que evacuar forzosamente ningún informe de valoración sobre el proyecto, a menos que se le solicite de manera expresa su evaluación a modo consultivo o que, con carácter previo, sea la Conselleria de Transición Ecológica la que sí haya considerado que el almacenaje de combustible es una actividad potencialmente peligrosa. En ese supuesto, Emergencias sí queda obligada a resolver.
Los promotores del proyecto renunciaron el pasado noviembre a ejecutar los 12 depósitos adicionales que se amparaban en una segunda fase, según el Puerto
Lo cierto es que, hasta ahora, el Ayuntamiento de Alicante no tiene constancia de que se haya tramitado la petición de permisos de obra y actividad por parte de TMS. Al margen del certificado de compatibilidad urbanística que se firmó en 2014, sólo ha trascendido la existencia de peticiones de información por parte de XC Business 90 y la reclamación de documentación adicional por parte de la Concejalía de Urbanismo, en la etapa en la que la competencia recaía bajo la responsabilidad del ya exedil de Guanyar, Miguel Ángel Pavón.
En esta línea, en el Ayuntamiento se desconoce igualmente si se ha producido una renuncia expresa por parte de TMS y de XC Business a desarrollar una segunda fase del proyecto para construir otros 12 depósitos adicionales, aunque fuentes oficiales del Puerto sí confirmaron que ese desestimiento sí se registró ante la Autoridad Portuaria el pasado noviembre.
Sea como fuere, fuentes municipales precisaron este viernes que el actual reponsable de la Concejalía de Urbanismo, Adrián Santos Pérez (Ciudadanos), prevé solicitar una reunión de coordinación con representantes de la Autoridad Portuaria para favorecer una transición lógica en la ordenación de la franja de integración Puerto-Ciudad a través del Plan Especial de Usos del Puerto, de modo que se evite el desarrollo de actividad industrial frente a zonas residenciales ya consolidadas o en construcción. Todo, según las mismas fuentes, sin perjuicio de que se siga considerando que el Puerto es un espacio en el que se generan actividades económicas y que, además, estas se canalicen fundamentalmente en los espacios más alejados del casco urbano.
Esa es la línea en la que tendría cabida el anuncio avanzado ya el mismo jueves por el alcalde, el popular Luis Barcala, sobre su intención de abrir negociaciones con TMS para que desista del proyecto planteado por XC Business 90 y apueste por otras actividades enfocadas en el marco de la innovación y la tecnología.