BERLIN (EFECOM). Air Berlin, la segunda aerolínea de Alemania, se declaró hoy insolvente tras dejar de recibir apoyo financiero Etihad Airways, su accionista mayoritario, y negocia la venta de parte de sus operaciones a Lufthansa.
Air Berlin solicitó este martes en el juzgado de primera instancia e instrucción de Berlin-Charlottenburg abrir un proceso de insolvencia para seguir con su reestructuración.
Air Berlin recibía desde hace años inyecciones financieras de su accionista Etihad, con una participación del 29 % en la compañía alemana, para mantenerse pero la aerolínea árabe se ha negado a prestarle más ayuda financiera debido a su mala situación.
La segunda aerolínea de Alemania, que ha tenido muchas dificultades para afrontar la fuerte competencia de otras compañías aéreas de bajo coste, va a seguir a flote con un crédito de 150 millones de euros del Gobierno alemán.
El grupo de aerolíneas Lufthansa y el Gobierno alemán apoyan a Air Berlin, que emplea a unas 7.200 personas, en sus esfuerzos de reestructuración.
La ministra germana de Economía, la socialdemócrata Brigitte Zypries, dijo que esta ayuda estatal asegurará que muchos alemanes que siguen de vacaciones puedan retornar tras el período estival.
El ministro de Transporte, el socialcristiano Alexander Dobrindt, afirmó que Air Berlin transporta a unos 80.000 pasajeros al día, con lo que la suspensión inmediata de la actividad dejaría en tierra a "decenas de miles de personas"; ambos políticos consideran que el servicio Air Berlin está asegurado durante tres meses.
Lufthansa garantiza que los aviones que alquila a Air Berlin, que vuelan con Eurowings y Austrian Airlines, puedan ser operados como hasta ahora.
Lufthansa alquila 40 aviones de Air Berlin, incluido el personal, principalmente para su filial de vuelos de bajo coste Eurowings y, en menor medida, para Austrian Airlines, que también pertenece al grupo.
Además, negocia con Air Berlin la adquisición de parte de la compañía y le ofrece la posibilidad de contratar personal, y espera llegar pronto a un acuerdo positivo en estas negociaciones.
Mediante el proceso de insolvencia que ha solicitado Air Berlin la dirección de la compañía seguirá dirigiendo la empresa, que funcionará con normalidad por lo que los billetes comprados son válidos, se llevarán a cabo los vuelos previstos y se pueden reservar nuevos viajes. También tratarán de mantener la empresa y sanearla.
La cotización en bolsa de Air Berlin se interrumpió este martes temporalmente tras comunicarse la insolvencia y después sus acciones bajaron hasta un 48 % al retomar la negociación.
El sindicato de pilotos Vereinigung Cockpit (VC) calificó la insolvencia de un "shock" para los empleados y criticó que Etihad haya dejado caer a Air Berlin. Air Berlin, que está fuertemente endeudada, decidió el año pasado reducir su flota hasta 75 aviones y recortar 1.200 empleos.
Además, quería concentrarse en su oferta de vuelos en Alemania, Italia, los países nórdicos y Europa del Este. También deseaba crear un nuevo grupo aéreo junto con TUIfly, la aerolínea a destinos vacacionales del grupo turístico TUI, pero los planes fracasaron.
En la filial austríaca Niki y la división de transporte de carga Leisure Cargo no se prevé una insolvencia. En 2016 tuvo una pérdida récord de 782 millones de euros (75 % más que 2015), por costes de reestructuración y depreciaciones, pero la situación ha empeorado desde la primavera con numerosos retrasos y cancelaciones de vuelos.