ALICANTE. En diez minutos y por unanimidad. El tripartito al frente del Ayuntamiento de Alicante, compuesto por PSOE, Guanyar y Compromís, acordó este lunes en Junta de Gobierno la contratación de urgencia de la empresa Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) para que asuma el servicio de limpieza de colegios y dependencias municipales a partir de este miércoles 1 de marzo. Como publicó este diario, la compañía se hará cargo de su prestación, asumiendo a su plantilla actual, tras la renuncia de Ortiz e Hijos acordada de manera unilateral el pasado 15 de febrero. La sociedad liderada por el controvertido promotor Enrique Ortiz justificó su decisión en la precariedad administrativa en la que venía asumiendo esa concesión, ya sin el respaldo legal de un contrato desde que expirase su vigencia, hace 20 meses.
La nueva contratación se aprobó incluso con el respaldo de los representantes de Guanyar que hasta ahora no habían apoyado de forma explícita ninguno de los acuerdos anteriores relacionados con la licitación de ese servicio al mantener su apuesta por la gestión directa. En la primera convocatoria del concurso, aprobada tras el verano, la agrupación electoral liderada por EU con el respaldo de Podemos se pronunció en contra de la aprobación del pliego. El concurso quedó convocado con los votos de PSOE y Compromís. Sin embargo, ese proceso de licitación acabó siendo anulado a principios de diciembre, en el último día de plazo para presentar ofertas, después de que los trabajadores a cargo del servicio anunciasen una convocatoria de huelga por el temor a que se produjesen despidos.
El equipo de Gobierno convocó una segunda licitación el pasado 14 de febrero, después de revisar los requisitos del pliego para introducir "cláusulas sociales" como la bonificación de las ofertas que garantizasen la continuidad de los puestos de trabajo. Ese segundo acuerdo Guanyar no se pronunció (su posición se contabilizó como abstención) que siguió abogando por la municipalización pese a reconocer las mejoras introducidas en las bases de la convocatoria.
Este lunes, en el procedimiento de contratación por el trámite de emergencia, Guanyar no tuvo reparos en posicionarse junto a sus socios de gobierno. Las fuentes consultadas por Alicante Plaza arguyeron que no es un cambio de posición ni una renuncia a su compromiso electoral por la municipalización sino que, en esta ocasión, el escenario es diferente: no se trata de apoyar una licitación, se trata de dar solución a un problema creado por las empresas de Ortiz que podría generar una situación de riesgo sanitario. Y ante esa situación, según las mismas fuentes, primaba un voto de responsabilidad, según apuntaron las fuentes consultadas. Otra cosa es que se siga pensando que era una buena oportunidad para asumir el servicio de manera directa al menos mientras se concreta la futura adjudicación. Al no encontrar respaldo en sus socios, Guanyar acabó abogando por procurar una solución lo más rápida posible.
La agrupación electoral liderada por EU sostiene que se trata de tomar una decisión por responsabilidad, para atajar un problema creado por una empresa de Ortiz
El riesgo sanitario es, de hecho, uno de los argumentos que justifican el procedimiento de contratación exprés seguido para garantizar la continuidad del servicio. Hasta dos informes municipales, emitidos por el jefe del servicio de Prevención de Riesgos y Medicina Laboral y por el veterinario municipal, concluyen que podría producirse una situación de alerta para la salud pública generada por falta de higiene en el caso de que no se limpiase en los 53 colegios de la ciudad (así como en el resto de dependencias públicas que dependen del Ayuntamiento). Ese situación expondría especialmente a la población infantil.
Con el acuerdo aprobado este lunes, FCC (una de las cinco ofertas que había presentado oferta en el proceso de consulta voluntario convocado por el tripartito) mantendrá el servicio de limpieza por un importe de 708.766 euros mensuales, hasta que se adjudique el nuevo concurso. FCC debe concertar ahora el traspaso del servicio con Ortiz e Hijos. Las dos empresas forman sociedad en la Unión Temporal de Empresas que presta el servicio de limpieza viaria y recogida de la basura.
Fuentes municipales precisaron que hasta este lunes no se tenía constancia de que Ortiz e Hijos hubiese pasado al cobro las facturas correspondientes a los meses de diciembre y enero, lo que sigue bloqueando el pago de las certificaciones correspondientes a esos meses. No ocurre lo mismo con el pago de las nóminas a los operarios que, pese a todo, ya habrían percibido los sueldos correspondientes. La única mensualidad que está en el aire es la de febrero. El comité de empresa asegura tener la garantía de que el Ayuntamiento buscaría la fórmula necesaria para poder abonarla de forma directa si la situación se prolonga.