PP y Cs reprueban a Echávarri por el caos en la gestión de Alicante con la abstención de Guanyar

ALICANTE. Una declaración institucional para reprobar al alcalde de Alicante por el "caos en la gestión municipal" presentada por el grupo municipal de Ciudadanos (Cs) al pleno de este jueves ha puesto en escena la crisis de gobernabilidad que se vive en el equipo de Gobierno. El partido de Albert Rivera ha conseguido que su iniciativa salga adelante por mayoría simple tras sumar a los votos del Partido Popular (PP). Los trece concejales de ambos grupos se han impuesto a los nueve en contra de PSOE y Compromís. Guanyar, el tercer socio del todavía tripartito, se ha abstenido. La misma posición que han adoptado los dos ediles no adscritos, Fernando Sepulcre y Nerea Belmonte.

La propuesta recrimina al socialista Gabriel Echávarri la dejación de funciones y le atribuye el desgobierno en el que, a su juicio, está sumida la ciudad. En sentido irónico, la portavoz de Cs, Yaneth Giraldo, ha querido tranquilizar al primer edil al sostener que no iba a privarle a los ciudadanos de la posibilidad de censurarle en las urnas cuando lleguen las próximas elecciones municipales de 2019. Y el portavoz municipal del PP, Luis Barcala, ha sostenido que la gestión del primer edil ha sido tan mala que los tres partidos que apoyaron su investidura hace dos años y medio, Guanyar, Compromís y Ciudadanos, ahora le piden su dimisión.

Los dos líderes de los grupos de la oposición han tenido dos duras intervenciones sobre la labor del primer edil, pero también lo ha sido, si cabe más, la del portavoz de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, aún socio de gobierno de Echávarri. El también vicealcalde y concejal de Urbanismo ha sostenido que el primer edil merece una reprobación por haber sido un auténtico obstáculo para el gobierno del cambio, pero ha dicho que su grupo no iba a votar a favor por respeto al trabajo de todos los concejales del equipo de Gobierno que sí han trabajado en esa dirección y que ha permitido grandes avances en todas las áreas. 

En esta línea, se ha detenido en las gestionadas por su partido, para asegurar que, desde que el tripartito llegó al poder, se han firmado 16.000 decretos en Urbanismo, se han multiplicado las ayudas sociales y se ha impulsado una programación cultural de calidad y participativa, entre otros puntos.

Eso sí, Pavón ha pedido explícitamente a Echávarri que presente su dimisión antes del día 15 para permitir que continúe el gobierno progresista que eligieron los ciudadanos en 2015. De lo contrario, ha avanzado que Guanyar presentará su propia propuesta de reprobación contra el alcalde en el pleno de noviembre. De hecho, ha añadido que las investigaciones en las que se encuentra inmerso "con sus continuos vaivenes en los juzgados" no son la mejor imagen para la ciudad. 

Guanyar ha mantenido su posición de abstención pese a que la portavoz municipal del PSOE, Eva Montesinos, había pedido que procurasen lealtad institucional a componentes del equipo de Gobierno como los socialistas hicieron frente a las propuestas de reprobación de Víctor Domínguez o en la defensa de Julia Angulo o Marisol Moreno (tres de los cinco ediles de Guanyar). Además, ha instado a todos los grupos políticos a no poner en el mismo nivel un caso de supuesta corrupción con "un error administrativo", en referencia al presunto amaño del Plan General que se investiga en el caso Brugal y al supuesto fraccionamiento de contratos del caso Comercio.

En el pleno se ha debatido una segunda declaración institucional de reprobación presentada igualmente por Cs. Esta vez, dirigida precisamente contra Montesinos en su condición de edil de Turismo, a quien Cs atribuye "incapacidad para consolidar y ampliar el turismo de cruceros" en base a dos circunstancias: la decisión de la naviera Costa Cruceros de no programar escalas este 2017 en Alicante y el traslado de Pullmantur, que había convertido a la ciudad en puerto base de sus cruceros en 2016 y 2017. 

Antes del debate de esa propuesta, el PP ya había conseguido forzar la comparecencia de la edil en el próximo pleno de noviembre. Montesinos tendrá que dar explicaciones sobre la denuncia interpuesta por una funcionaria de la Concejalía de Deportes (de la que la regidora también es titular) por un supuesto delito de acoso laboral. De hecho, la edil debe prestar declaración en calidad de investigada por esos hechos este viernes. Con todo, su reprobación no prosperó. PSOE, Guanyar y Compromís votaron en contra y los dos ediles no adscritos se decantaron por la abstención. Cs y PP sumaron 13 votos a favor, frente a los 14 noes del tripartito. Los representantes de los tres grupos aliados insistieron en que las cifras de cruceristas seguirán creciendo, en función de la programación de escalas prevista para 2018, y calificaron de injusta la propuesta de reprobación de Montesinos tras defender que se habían multiplicado las cifras de llegada de turistas a la ciudad. La oposición defendió justo todo lo contrario y responsabilizó a la edil de la falta de planificación de una oferta turística de calidad para captar nuevas compañías.

El debate, que se ha alargado durante más de seis horas, ha estado marcado por la crisis de gobernabilidad instaurada entre los tres socios que comparten responsabilidades de gestión. Las discrepancias entre los tres socios, que han reproducido las que se registraron en el pleno de septiembre, junto a la reprobación de Echávarri han eclipsado otros acuerdos como la asignación de sueldo a la única edil de la corporación adscrita a un grupo (Belmonte no percibe sueldo desde su expulsión de Guanyar y Sepulcre cuenta con una asignación de la Diputación) que hasta ahora desempeñaba sus funciones sin ningún tipo de retribución. Se tata de María José Molina, de Cs, que tomó posesión del acta tras la renuncia de José Luis Cifuentes. Cs había solicitado desde hace meses que se solventase esa situación. Sin embargo, no se había promovido el acuerdo hasta ahora.

En el pleno también se ha aprobado una moción del PP (con apoyo de Cs y de Sepulcre) para que se redacte un plan integral de mejora de áreas industriales, pese a que Compromís ha incidido en que es un trabajo que ya se está realizando. Igualmente, ha prosperado por unanimidad una propuesta de Guanyar para que Alicante presente su solicitud ante la Generalitat con el objetivo de convertirse en Capital Cultural Valenciana 2018-2019. También ha sido tenso el debate de otra propuesta de Guanyar para condenar la violencia ejercida contra manifestantes y periodistas el pasado 9 d'Octubre en València, aprobada por el tripartito con el apoyo de Belmonte. Y no lo ha sido menos el debate sobre la declaración insitucional de Cs sobre el rechazo a las prácticas de "adoctrinamiento nacionalista de menores en los centros educativos de la Comunitat", que ha sido rechazada por el tripartito y Belmonte y apoyada por los proponentes y por el PP.