Vista aérea de los trabajos en el trazado de la variante de la N-332. Foto: EFENOU/AYTO. BENISSAALICANTE. Ahora sí. La Dirección General de Carreteras del Ministerio de Fomento ha firmado por fin, con dos meses de retraso, la adjudicación de las obras de la variante de la carretera N-332 en Benissa a la empresa Obrascón-Huarte Laín S.A. (OHL), que fue la mejor valorada por la mesa de contratación el pasado febrero, tal como ha venido contando Alicante Plaza. La adjudicación, aunque estaba decidida desde hace tiempo, no se había hecho oficial al estar prorrogados los Presupuestos Generales del Estado (PGE), según las fuentes consultadas por este diario. Ahora que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, acaba de entregar el anteproyecto de las cuentas estatales para el año en curso al Congreso, para que comiencen su tramitación, Fomento ha podido por fin oficializar la adjudicación.
Al concurso para una de las grandes obras que se ejecutarán este año en la provincia, donde los PGE apenas destinan unas migajas para inversiones en carreteras (una de ellas, esta variante), se presentaron un total de 36 empresas constructoras, lo que da una idea de la expectación que había generado la terminación de la variante. Como se recordará, los trabajos ya se habían adjudicado y se estaban ejecutando, pero la obra quedó paralizada en 2009, cuando la empresa adjudicataria del proyecto, Begas Construcciones y Contratas S.L., entró en concurso de acreedores.
Aunque se siguió presupuestando en los años siguientes, en realidad nunca se volvió a adjudicar. Y luego llegaron los recortes en Fomento por la crisis. Siete años después, días antes de las elecciones generales de junio, el Ministerio de Fomento sacó el proyecto a licitación por 29,7 millones de euros más IVA (en total, 35,9 millones). Sin embargo, OHL la ejecutará por un precio sensiblemente menor, según la resolución de adjudicación a la que ha tenido acceso Alicante Plaza: la empresa se ha llevado la contrata con una oferta de 21,8 millones de euros (18 millones más IVA).
La oferta de OHL se ha impuesto a las otras 35 precisamente por ser "la más ventajosa económicamente". No en vano, su rebaja respecto al precio de licitación es de más de una tercera parte. La oferta económica otorgaba el 60% de la puntuación final, y las mejoras técnicas el otro 40%. La oferta técnica se abrió el 4 de octubre de 2016, y la económica a principios de noviembre. Aunque oficiosamente se sabía que el adjudicatario era OHL, el Ministerio de Fomento se había negado a hacer pública la resolución hasta ahora, que ya se ha firmado la adjudicación.
El retraso en la adjudicación, no obstante, no parece que vaya a alterar de forma notable el calendario previsto para la actuación. Como ya contó este diario en su momento, Fomento tenía fijado el mes de abril como fecha orientativa de inicio de las obras, según la documentación sobre el proyecto colgada en su página web. De esta forma, y según el plazo de ejecución (de 32 meses), la variante de Benissa debería estar terminada para comienzos de 2019. Eso si no surgen nuevos contratiempos.
Actualmente circulan por la N-332 a su paso por el término municipal de Benissa más de 12.000 vehículos diarios. La construcción de la variante permitirá separar los tráficos de largo y medio recorrido de los de circulación estrictamente local. La variante comenzará su trazado en el kilómetro 175,190 de la carretera N-332, para alejarse de la población de Benissa y acercarse al trazado de la AP-7. Después de 4,5 kilómetros, se vuelve a incorporar al trazado de la N-332, en el kilométro 179,650. Será una carretera convencional con carriles adicionales para vehículos lentos en ambos sentidos, según el proyecto.
La terminación de la variante está en el trasfondo del sorprendente cambio de gobierno vivido en Benissa hace solo unos meses. El exalcalde y ahora asesor en la Diputación Provincial de Alicante Juan Bautista Roselló, al frente de la Alcaldía durante 17 años, quería aprovechar el reinicio de las obras para abandonar el cargo. No obstante, el retraso en la firma de la adjudicación y las presiones de su por aquel entonces apoyo puntual, el edil de C's Isidor Mollà, para que se apartase de la Alcaldía, llevaron a Roselló a anunciar su dimisión en diciembre, tras inaugurar la nueva Casa de la Cultura de Benissa. Supuestamente, porque estaba garantizado el apoyo de Mollà al edil propuesto por el PP para suceder a Roselló. No obstante, todos los partidos de izquierda pactaron el apoyo a Abel Cardona, de Reiniciem, y Mollà se decantó por esta opción, enviando al PP a la oposición.
Ahora, será Cardona quien rentabilice (si así lo desea, pues el nuevo gobierno de Benissa tiene el compromiso de no inaugurar obras ni entregar diplomas) la reactivación de las obras más esperadas en el norte de la provincia desde hace una década. Tampoco se hará la foto el ministro de Justicia (y ex de Fomento), Rafael Catalá, que tenía un empeño personal en poner la primera piedra como visitante asiduo de Dénia que es mientras desempeñaba las competencias de Ana Pastor (que dejó Fomento al pasar a presidir el Congreso de los Diputados). Ese papel corresponderá ahora, en todo caso, a Íñigo de la Serna.
