El tripartito desatasca su primera gran obra: La Generala se perfila para la 'nueva' Casa de la Festa       

ALICANTE. La primera gran obra del tripartito de Alicante, al menos en términos de presupuesto, entra en la recta final de su proceso de contratación: la reforma y ampliación del edificio de la Casa de la Festa. El concurso convocado en diciembre de 2016 por un importe de licitación de 4,25 millones (IVA incluido) comprende la mejora y adaptación de varias plantas del inmueble, de propiedad municipal, que ahora permanecen prácticamente desocupadas con el propósito de que puedan acoger oficinas y servicios del Ayuntamiento. Todo, al margen de las actuales dependencias que ahora ocupan el Museo de Fogueres y la Federació, entre otras entidades y colectivos festeros locales. 

Fuentes consultadas por Alicante Plaza precisaron que, tras el análisis técnico de las 46 ofertas que se presentaron, todo apunta a que una Unión Temporal de Empresas (UTE) liderada por La Generala acabará convirtiéndose en adjudicataria de los trabajos al tratarse de la propuesta que habría recibido una mayor puntuación. La licitación atrajo a las empresas más importantes del sector de la obra pública y de la edificación y se convirtió en el primer proceso convocado por PSOE, Guanyar y Compromís que suscitó el interés del controvertido empresario Enrique Ortiz, que hasta ese momento se había apartado de todos los concursos de obra y servicios impulsados por el Ayuntamiento de Alicante.

Las obras tienen un plazo de ejecución de un año y, previsiblemente, no comenzarán hasta después del verano, lo que conlleva que, como muy pronto, no estarán finalizadas hasta la conclusión de 2018. Esa circunstancia provocará una primera consecuencia: el equipo de Gobierno queda abocado a tener que solicitar a la Cámara de Comercio una prórroga sobre el alquiler del edificio del antiguo Hotel Palas. 

Los plazos de finalización de esa obra han forzado al equipo de Gobierno a tramitar una prórroga del alquiler del edificio de la Cámara

Como viene informando este diario, el contrato de alquiler suscrito durante la etapa de Gobierno del PP vence a finales de este año. El tripartito preveía poder trasladar las dependencias que ahora se reparten en el inmueble de la calle Cervantes tanto al nuevo edificio de la Concejalía de Urbanismo, entre la plaza del Ayuntamiento y la calle San Fernando (la antigua sede de la Cámara), como a la Casa de la Festa, una vez reformada. El objetivo era liberar el gasto que supone el arrendamiento del edificio cameral: nada menos que 530.000 euros anuales. 

No obstante, la previsión de las fechas de finalización de la reforma de la Casa de la Festa han movido ya al equipo de Gobierno a promover su continuidad en el antiguo Palas al menos hasta 2019. El acuerdo, según las fuentes consultadas, se adoptará la próxima semana o, como muy tarde, en quince días, ya que -de acuerdo con el contrato- la petición de prórroga debe ser comunicada seis meses antes de que expire, es decir, en junio.