ALICANTE. La Autoridad Portuaria de Alicante (APA) comienza a encarrilar la construcción de su futura estación intermodal interna con la que pretende ayudar a multiplicar el tráfico de mercancías. Y, con ello, favorecer su transporte con la posibilidad de intercambio entre el barco y el tren, como fórmula por el fomento de la sostenibilidad en el sector logístico frente al transporte por carretera convencional. Con ese fin, acaba de contratar la elaboración de un informe a la consultora Civis Consultores Asociados concebido como un "estudio funcional de ordenación de terminales ferroportuarias en el puerto de Alicante". En él, se debe procurar soluciones para el encaje de esa futura estación, delimitar su emplazamiento concreto, así como sus características, capacidades y necesidades, según fuentes consultadas.
Eso sí, ese estudio no se limitará a esa futura estación. También debe considerar el funcionamiento de la terminal de Hub Portuario de Alicante, operada por JSV Logistic, en el muelle 11, desde la que ya organiza al menos dos conexiones semanales por tren con la estación madrileña de Abroñigal y con la terminal multimodal de Miranda de Ebro, gestionada igualmente por JSV. Y con ello, la posible vertebración entre ambas.
Al tiempo, ese informe de planificación debe considerar también el futuro entronque del Puerto con el Corredor Mediterráneo, tanto por el sur, con Murcia y Andalucía, a través de la conocida como Variante de Torrellano, como por el norte, a través de La Encina (con el tercer hilo para mercancías), para la que todavía no se habría despejado una solución definitiva, pendiente de posibles adaptaciones por parte del ente Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) del Ministerio de Transportes.
En principio, la entrega de ese trabajo de planificación técnica encomendado por el Puerto no debería demorarse más allá de finales de febrero, toda vez que el plazo de ejecución previsto en el momento de su contratación es de 21 días. De hecho, su elaboración resulta hasta cierto punto urgente toda vez que la Autoridad Portuaria pretende elevar a corto plazo a su consejo de administración la correspondiente propuesta de acuerdo de solicitud para que la nueva terminal pueda ser declarada como infraestructura de interés general. Esa petición se elevará a Puertos del Estado para que evalúe y conceda ese reconocimiento.
A partir de ahí, se comenzaría a precisar un proyecto de ejecución concreto y se buscaría la consignación presupuestaria necesaria para financiarla, para lo que se espera contar con fondos estatales e incluso aportaciones europeas, al margen de la posible contribución que pudiese aportar el Puerto con recursos propios, como se ha actuado en otras intervenciones previas de cierta envergadura. Entre ellas, la renovación del paseo marítimo o la ampliación del Parque del Mar, por ejemplo.
Terminal ferroportuaria
¿Dónde quedaría posicionada esa futura estación intermodal interna? La hoja de ruta que se ha anticipado hasta ahora desde la toma de posesión de Luis Rodríguez como nuevo presidente del Puerto contempla que quede emplazada en la terminal de mercancías que gestiona TMS en régimen de concesión. En concreto, se ha planteado que podría quedar encajada en los terrenos del muelle 19. Esa ubicación, eso sí, quedaría al menos parcialmente afectada por el proyecto de planta de almacenaje de combustible promovido por XC Business 90 que comprende la instalación de seis depósitos en la explanada de ese muelle, en función del acuerdo alcanzado con TMS.
El desarrollo de ese proyecto ocuparía parte del entorno del espacio previsto para la instalación de la terminal. De ahí que los silos proyectados por la compañía puedan suponer un condicionante, según reconoció el mismo Rodríguez en una entrevista concedida a Alicante Plaza.