ALICANTE. El Ayuntamiento de Alicante encuentra la solución exprés para mantener el servicio de limpieza en los colegios y dependencias municipales tras la renuncia de la empresa Ortiz e Hijos a seguir prestándolo a partir del 1 de marzo. El alcalde, el socialista Gabriel Echávarri, ha confirmado que el próximo lunes se contratará a una nueva empresa para cubrir el servicio de limpieza de colegios a través de un procedimiento de urgencia justificado en una situación de emergencia, derivada del riesgo sobre la salud pública que entrañaría una hipotética interrupción del servicio. En esta línea, ha señalado que ya se había solicitado informes a los servicios municipales de Sanidad y Medio Ambiente para evaluasen el riesgo incurrir en esa situación, para poder completar el expediente "y ya nos han anticipado que, sin duda, podría llegarse a esa situación de emergencia, especialmente delicada al tratarse de centros a los que acude la población en edad escolar".
Para la selección de esa nueva empresa a cargo del servicio, Echávarri ha apuntado que, pese a no ser necesario (se podría optar por una contratación directa de una sociedad seleccionada por el propio ayuntamiento) se ha solicitado presupuesto a tres empresas para poder escoger la propuesta que resulte económicamente más ventajosa. Se trata de FCC, Ferrovial y Clece. El propio alcalde ha dicho haber contactado directamente con las tres y que las tres habrían mostrado su predisposición a suplir a Ortiz e Hijos. La empresa que finalmente resulte elegida deberá asumir a la plantilla actual para prestar el mismo servicio que hasta ahora durante el tiempo en el que se demore la nueva adjudicación, entre mayo y junio. La contratación exprés tomará como precio de referencia el presupuesto de licitación del nuevo concurso convocado la semana pasada, lo que supone que el Ayuntamiento pagará un importe superior al abonado hasta ahora a Ortiz e Hijos, en base al presupuesto de la contrata anterior, caducada desde hace 20 meses. En primer lugar, porque el precio del nuevo concurso (18 millones) es ligeramente más elevado y, además, no tiene en cuenta el 5% de rebaja conveniado con Ortiz e Hijos en octubre de 2015, cuando la empresa se comprometió a seguir a cargo de la contrata -ya sin el respaldo legal de contrato- hasta que se produjese una nueva licitación. Echávarri ha reiterado este martes que la empresa ha incumplido ese convenio, por lo que ahora "el ayuntamiento le reclamará en los juzgados la diferencia entre el precio actual y el nuevo precio al que se verá abocado a pagar a raíz de su decisión de romper unilateralmente ese acuerdo".
Sobre la fórmula escogida para garantizar la continuidad del servicio, el primer edil ha admitido que se estudió la posible gestión directa que había propuesto Guanyar, pero ha dicho que finalmente, tras consulta con los técnicos municipales, se ha considerado que no era viable desde el punto de vista jurídico y económico por los mismos motivos por los que se descartó la municipalización y se tuvo que acudir a la convocatoria de un nuevo concurso.