VILLENA. El Ayuntamiento de Villena ha presentado ante el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico alegaciones contra la autorización administrativa previa concedida por la Dirección General de Política Energética y Minas con el objetivo de impedir la puesta en marcha de la planta solar ‘Villena Solar’ que impulsa Repsol Renovables ante las posibles afecciones que su ubicación pudiera tener en el área próxima a Sierra Salinas, que el Ayuntamiento reclama a la Generalitat como Parque Natural.
El documento municipal argumenta que el conjunto de proyectos presentados en Villena supera el 3% de ocupación del territorio establecido en la norma autonómica para el término municipal de Villena, y abunda en la falta de un estudio del impacto medioambiental en el que se analice el efecto sobre el territorio y el medio ambiente del conjunto de las plantas propuestas en la zona, y no sólo su impacto individual de cada una de ellas. En la actualidad, en la misma zona donde se plantea ubicar ‘Solar Villena’ hay un total de ocho solicitudes y tres plantas en funcionamiento, muy próximas a la zona de Sierra Salinas.
El Decreto Ley 1/2022 entiende que se puede llegar a ocupar hasta un máximo del 3% del suelo no urbanizable común con instalaciones fotovoltaicas. No obstante, con la definitiva aprobación del proyecto ‘Solar Villena’, “conforme a esta premisa - y considerando todos los proyectos en tramitación en el municipio de Villena - supondrían una ocupación del 7,36%, se estarían sobrepasando los límites determinados”, según se argumenta en el documento remitido al Ministerio. Por todo ello, el Ayuntamiento estima que la propuesta de Repsol Renovables “se considera inviable y no acorde a un uso racional del suelo la planta solar fotovoltaica Villena”.
Esta es la línea de defensa del Ayuntamiento de Villena desde la presentación de los proyectos de instalación de plantas solares, que apunta a la defensa del territorio con la asunción de que deben ubicarse plantas de energía solar, aunque bajo el respeto al territorio, el suelo, sus usos tradicionales y una ordenación coparticipada entre todas las Administraciones. En la actualidad, de los 34 proyectos iniciales presentados, tanto ante la Administración central como autonómica, sólo quedan vivos menos de un tercio.
Entre otros argumentos, el documento también incide en el alto número de solicitudes para ubicar instalaciones en las mismas áreas del término municipal de Villena. Cada una de ellas presenta un plan medioambiental, pero el Ayuntamiento considera que “cada proyecto de planta solar fotovoltaica ha analizado individualmente su impacto sobre los diferentes elementos ambientales (fauna, hábitats, paisaje, vegetación,..), pero no se ha abordado un análisis de esos mismos elementos ambientales considerando una ocupación de 1.200 hectáreas”, ya que se entiende que “las medidas preventivas, correctoras y compensatorias planteadas de manera individualizada a cada proyecto, podrían no ser efectivas dada la escala global del conjunto de intervenciones puesto que no ha sido objeto de evaluación”.
En especial, cuando las diferentes propuestas se concentran en un área sensible medioambientalmente para la Sierra Salinas, un paraje que el propio Ayuntamiento ha reclamado ante la Generalitat su catalogación como Parque Natural de la Comunidad Valenciana, elevando su nivel de protección actual a la máxima categoría.