BENIDORM (EFE). El Servigroup Hoteles Benidorm visita este domingo al Recoletas Atlético Valladolid en el Polideportivo Huerta del Rey de Valladolid (19:30 horas), una de las pista malditas para el conjunto benidormense, ya que nunca ha ganado allí y solo ha podido arrancar un empate en sus siete visitas anteriores.
El equipo de Sergio Carballeira afronta este partido en una cómoda situación en la tabla, ya que ha sumado cinco puntos de ocho posibles, mientras su rival, con solo tres en su casillero, está más necesitado, si bien se mantiene invicto como local.
El conjunto benidormense afronta este partido con las bajas de larga duración de Mirko Djurovic, Leo Alonso y el portero polaco Krystian Witkowsk, lesionados, y con la incógnita del francés Mané Abdoulah, reciente fichaje del club.
El lateral galo, recambio natural de Leo Alonso en la plantilla, lleva varios días entrenándose con el equipo, pero el club aún no ha recibido el 'transfer' desde la federación europea, por lo que su participación en el partido depende de que se cumpla a tiempo este trámite burocrático.
“Es una pista que no se nos ha dado bien por el tipo de juego, pero vamos con muchas ganas y confianza porque estamos en un buen nivel defensivo y eso nos hace pensar que podemos ganar en cualquier cancha”, indicó Carballeira.
“Debemos pensar en nosotros más que en el rival y en que si mantenemos el estilo y con un nivel defensivo alto estaremos agarrados al partido”, dijo el técnico gallego, que pronosticó que Valladolid practicará un juego “de transiciones rápidas”.
“Ellos tienen un equipo con bastante desequilibrio en el 'uno contra uno' y tendremos que estar pendientes de las ayudas y a partir de ahí, tratar que los pequeños detalles caigan de nuestro lado”, concluyó.
