VALÈNCIA. Cupo catalán, reforma del sistema de financiación, fondo de nivelación... son varios conceptos que han tomado la agenda política nacional y autonómica este mes de agosto. El acuerdo alcanzado entre PSOE (PSC) y ERC para una "financiación singular" para Cataluña a cambio de la investidura del socialista Salvador Illa, ha generado un terremoto en la actualidad veraniega, provocando que se abran otros asuntos colaterales que, pese a los esfuerzos de la Comunitat Valenciana, no habían merecido la atención mediática y política en Madrid.
Así, el denominado cupo catalán -otros lo llaman directamente "concierto", al estilo del régimen vasco y navarro-, ha abierto una puerta que hasta ahora permanecía cerrada a cal y canto: la de que otras autonomías puedan negociar bilateralmente la financiación que perciben por parte del Estado. Al menos es lo que ha deslizado estos días la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, quién sabe si simplemente para ganar tiempo y apaciguar al resto de regiones o si porque realmente alberga un deseo real de avanzar por esa senda.