VALÈNCIA. El Ayuntamiento de Manises prevé la instalación de cámaras de seguridad en el entorno de la calle Rafael Valls para controlar el tráfico de vehículos pesados. De esta manera, el consistorio da respuesta a las exigencias de los vecinos de esta zona, que, debido al proyecto de la Ronda Norte, soporta un tráfico denso, especialmente de camiones con un gran tonelaje .
Esta infraestructura, cuyas obras fueron aprobadas en mayo a través de la Junta de Gobierno municipal, unirá el acceso al municipio desde Paterna por la carretera CV-317 y el polígono industrial El Barranquet. Asimismo, el proyecto se enmarca dentro de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrada (EDUSI) de Manises, que tiene como objetivo desviar los vehículos pesados del casco urbano y, a su vez, mejorar la fluidez del tráfico en la calle Rafael Valls.
La instalación de las cámaras de seguridad, para las que el consistorio todavía no tiene presupuesto, permitirá identificar la matrícula de aquellos que incumplan la prohibición de paso de vehículos pesados por esa vía o accesos colindantes. Se trata de una medida que complementa otras ya llevadas a cabo por el consistorio; todas ellas a petición de los vecinos: la mejora de la señalización vial y el incremento de los controles policiales en la zona.
En ese sentido, fuentes municipales confirman a este diario que la Policía Local de Manises realiza controles diarios en las horas punta para evitar la infracción de la normativa. "Con las medidas implementadas, el número de incidentes en la calle Rafael Valls se ha reducido considerablemente", aseguran desde el ayuntamiento.
Circulación en único sentido
El descenso del tráfico pesado en la calle Rafael Valls era una reivindicación histórica de sus vecinos desde el anuncio del proyecto de construcción de la Ronda Norte. De hecho, la entidad vecinal ha reiterado al Ayuntamiento de Manises en múltiples ocasiones que tomase "medidas urgentes para mejorar la seguridad y salud de los residentes".
De hecho, en los últimos meses, el alcalde del municipio, Javier Mansilla, ha mantenido reuniones con el vecindario para tomar nota de sus exigencias. Entre las peticiones de la entidad vecinal, destaca la de cambiar el sentido de circulación. En la actualidad, los vehículos pueden transitar por esa vía en dos sentidos, por lo que habitualmente se forman embotellamientos, sobre todo si se permite que los vehículos pesados circulen por una calzada "tan estrecha".
La idea es que, una vez finalicen las obras de la Ronda Norte, el sentido de la vía pase a ser único, de tal forma que el tráfico pueda descongestionarse en esa zona. La intención del ayuntamiento es llevar a cabo esta modificación cuando se acometa dicho proyecto, así como las actuaciones de la carretera N-220, de acceso al aeropuerto y autorizadas por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible.