VALÈNCIA. En la segunda actualización de la Estrategia de vacunación frente a covid-19 en España elaborada por el Ministerio de Sanidad y hecha pública el 21 de enero se detallaba qué grupos debían recibir la dosis en la primera etapa: residentes y personal sanitario y sociosanitario en esos centros; personal de primera línea en el ámbito sanitario y sociosanitario; otro personal sanitario y sociosanitario, y personas consideradas como grandes dependientes.
En ninguna de estas categorías, que se describían ampliamente en el documento, aparecían los liberados sindicales de la Sanidad pública, que son varios cientos, la mayoría de los cuales no presta ninguna asistencia sanitaria ni está expuesta al peligro que corren sus compañeros porque se dedican a labores sindicales. Sin embargo, según ha podido saber este diario, numerosos de ellos fueron vacunados con la primera dosis antes que otros sanitarios que atienden en primera línea a enfermos de covid.
Ocurrió durante las primeras semanas de enero, cuando en varios departamentos se incumplieron las directrices que se habían marcado desde el Ministerio de Sanidad con el acuerdo de las Comunidades Autónomas. Cerca de 200 personas fueron vacunadas cuando no les tocaba, según afirmó Ximo Puig, pero solo salieron a la luz los nombres de algunos alcaldes -El Verger, Els Poblets, La Nucía, Rafelbunyol- y concejales y el del fiscal jefe de Castellón, que dimitió.