CASTELLÓ. El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha precisado este martes en Castelló que la ayuda prometida de 50 millones de euros para el azulejo deberá contar primero con el visto bueno de Bruselas y, posteriormente, aprobarse por el Consell. Estas ayudas están dirigidas a hacer viable la transición energética del sector cerámico y se destinarán de manera directa a las empresas gasintensivas.
Así lo ha manifestado el president durante su intervención en un acto organizado por el Periódico Mediterráneo, donde ha explicado que se espera que la Unión Europea apruebe esta misma semana o la próxima el "marco paraguas" que hará posible destinar ayudas públicas al sector azulejero para hacer viable y competitiva su transición energética. De este modo, el Consell podrá aprobar en el siguiente pleno tras la autorización europea ayudas a la empresa gas intensiva, según fuentes de la Generalitat.
Durante su intervención, Puig también ha mostrado el apoyo del Consell a otras iniciativas dirigidas a la descarbonización, como los proyectos de hidrógeno verde presentados al PERTE, las acciones para reducir barreras en mercados relevantes como Arabia Saudí, y la aceleración de la transición a las energías renovables.