VALÈNCIA. La Dana del 29 de octubre ha castigado con dureza a la localidad de Albal: infraestructuras esenciales como centros educativos, edificios municipales y servicios sociales se encuentran entre las principales víctimas materiales. El municipio afronta la difícil tarea de reconstruirse tras las inclemencias climáticas; un desafío que el alcalde, José Miguel Ferris, ha asumido con determinación. Con el respaldo de un pacto de gobierno con Avant Albal y Vox, Ferris, que ya formaba parte activa del Partido Popular desde su juventud, encabezó una histórica victoria electoral en los comicios municipales de 2023 al desbancar al dirigente socialista, Ramón Marí, que había gobernado el Ayuntamiento de Albal durante 20 años.
El primer edil en este municipio de l'Horta Sud encara su primer año de mandato hacia la recuperación de un Albal devastado, comenzando por la restauración de los servicios esenciales. Entre las prioridades de su gestión, se encuentra la reapertura de los centros educativos afectados por el temporal, una tarea compleja que todavía no se ha ejecutado por completo; especialmente, en el caso del IES d'Albal, cuyo alumnado y equipo directivo esperan retomar cuanto antes la actividad lectiva tras semanas de parón. Sin embargo, la reconstrucción no es el único frente abierto para Ferris. En su visión para Albal, la mejora de la conectividad y la movilidad es fundamental.