VALÈNCIA. Impaciencia sería el término para describir el estado en el que algunos vecinos del barrio del Cabanyal se manifiestan cuando se les pregunta sobre el Plan Especial (PEC) que tramita el Ayuntamiento de València y concretamente el área de Urbanismo, que ahora mismo trabaja en la contestación de las últimas alegaciones presentadas por los interesados.
Sin embargo, residentes de la fachada marítima han asistido con no poca sorpresa al inicio de actuaciones de construcción en varias parcelas que están afectadas por el Plan Especial del Cabanyal, lo que ha suscitado algunos interrogantes dado que dicho planeamiento no se ha aprobado definitivamente por el consistorio todavía.
Se trata de unos solares sitos en el cruce entre el bulevar Serrería (calle Lluís Peixoy la Avenida de los Naranjos -comúnmente conocida con su denominación en valenciano, Tarongers-, y que están afectados por uno de los puntos de especial incidencia del Plan, la Unidad de Ejecución número 3.
"Los vecinos están quejándose", explica uno de los residentes del barrio. Por el momento hay movimiento de tierras, y en la zona advierten sobre la construcción de una gasolinera en dicho solar. Un posible uso al que también apuntaron desde el consistorio al ser consultadas fuentes conocedoras del proyecto.
En esta Unidad de Ejecución, los arquitectos del Plan preveían una edificación de uso terciario comercial en la parte recayente en Serrería, mientras que proyectaban otra para uso terciario educativo, posiblemente residencias universitarias dada la cercanía con los campus universitarios. El resto, la versión preliminar lo dedicaba a equipamientos.
No está prohibido llevar a cabo actuaciones, según señalan fuentes del Ayuntamiento de València, pese a que el PEC todavía esté en ciernes y no haya sido ratificado por el consistorio ni haya entrado en vigor. Eso sí, señalan que las actuaciones deben estar en concordancia con lo previsto en el planeamiento expuesto. De hecho, apuntan, se han estado otorgando licencias tanto de rehabilitación como de obramientras que el planeamiento seguía su tramitación administrativa, en aquellos casos que cumplieran con el Plan.
Se entiende que si se ha concedido una licencia es porque cumplía con los usos y las normas urbanísticas previstas. En el caso de que el propietario la ostentara previamente a la suspensión de licencias y hubiera presentado alegación alguna al Plan, el consistorio estudiará que la documentación de dicha licencia esté en regla y podría acabar dándole la razón.