GANDIA. La ciudad Ducal ha sido conquistada. Desde el viernes 3 de mayo sus calles y plazas han sido ocupadas por vehículos y motos que lucen descuentos sobre su luna delantera y que son accesibles para todos aquellos que se acerquen hasta la capital de la Safor antes del domingo 5 de mayo. No es el único atractivo, la cultura y gastronomía de Gandia es también un aliciente mientras se ven los distintos modelos que hay en la octava edición de la Fira del Motor. Y más en esta edición, que coincide con la Fira de abril y los comercios del centro histórico estarán abiertos.
Una octava edición que, como recordó Diana Morant, alcaldesa de Gandia, «es una Fira consolidada por el número de visitantes, de stands e incluso de ventas». Tal y como recordó, el año pasado la recaudación fue de seis millones de euros —objetivo a cumplir, indicó— y animó a venir hasta Gandia para disfrutar de la tercera feria del motor en importancia de la Comunitat Valenciana, que tiene el atractivo también de desarrollarse en el centro histórico. Además, puntualizó que es una magnífica ocasión para renovar el parque móvil para que —el coche no sea una amenaza».