El precio de una inhumación y una cremación son muy similares. El féretro es el concepto que más pesa en la factura, seguido del cementerio y el tanatorio, entre más de una docena de conceptos diferentes.
VALÈNCIA. Con el fin de conocer el coste actual de un entierro y una incineración, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha solicitado presupuesto en 113 funerarias de 29 ciudades. La premisa común era un entierro sin lujos ni extras, pero digno, similar a lo que suela gastarse en la ciudad e incluyendo el alquiler de un nicho durante un periodo mínimo de cinco años. Al mismo tiempo se solicitó presupuesto para una cremación.
El precio medio es de 3.739 euros para una inhumación y de 3.617 euros para una cremación, pero puede variar mucho según el municipio. Por ejemplo, el coste medio de un entierro en Alicante (5.455 euros) dobla el de Cádiz (2.551 euros) y Zaragoza (2.539 euros); y supera con creces el de Valencia (3.368 euros).
Del mismo modo, OCU ha encontrado grandes diferencias de precio dentro de una misma ciudad según la funeraria contratada: en Alicante, el coste de un entierro varía entre 4.886 y 6.164 euros; y en Valencia oscila entre 2.542 y 4.434 euros. El ahorro medio es del 28%, similar para una cremación, de ahí que, aunque no sea una práctica extendida, es recomendable pedir al menos un par de presupuestos diferentes. El estudio también revela los conceptos con un mayor peso en la factura, como son el féretro, el cementerio y el tanatorio, entre más de una docena de conceptos diferentes: coche fúnebre, esquelas, flores, responso, etc. que también varían según la funeraria.
OCU critica la falta de transparencia de muchas funerarias: una de cada tres no entrega un desglose detallado de los distintos conceptos, lo que dificulta las comparaciones entre presupuestos. Por cierto, en algunos presupuestos se incluyeron descuentos y conceptos gratuitos, aunque no siempre implican que el precio final sea más barato que el de otra empresa de la misma ciudad.
En cuanto a la evolución de los precios, OCU ha comprobado que el incremento de los últimos ocho años ha sido moderado y permanecen relativamente estables. La inhumación ha subido un 5,5% y la incineración un 6,8%, mientras que el incremento acumulado del IPC en ese periodo ha sido similar, del 5,8%.