Una comida entre los grupos de Cs de la Diputación y Alicante aceleró los ceses en el comité territorial 

ALICANTE. Hay diversas versiones de por qué se ha producido el relevo de los tres hombres fuertes de Ciudadanos en la Diputación de Alicante en el comité provincial. Ahora bien, si las hostilidades debían abrirse en función de los resultados del 19J en Andalucía, lo que está claro es la decisión de relevar a Javier Gutiérrez, César Martínez y Chechu Herrero de la dirección, va a acelerar el debate, o soterrarlo, según se mire. Además de la crisis generada por la moción de censura de Orihuela, se suman los titubeos de una parte de los cargos de Cs con el PP, sobre todo, allí donde se gobierna de manera conjunta. Y la gota que ha colmado el vaso es la comida alternativa organizada por un sector del partido, con representantes de la Diputación de Alicante y del ayuntamiento de la capital, este domingo electoral en Andalucía, en el restaurante El Sorell.

 ¿Por qué esa comida? Ciudadanos suele celebrar una comida en las fiestas de Fogueres que reúne a los principales cargos a nivel nacional, autonómico y provincial. Esa comida oficial está prevista para el 24 de junio. Así que a la dirección no le sentó bien, más allá de las diferencias internas, que esa nueva reunión paralela entre los grupos de la Diputación y el ayuntamiento alicantino se produjera en plenas elecciones andaluzas y que no se esperara al ágape oficial. Desde la dirección se considera que el 19J los cargos de Cs en Alicante deberían estar en Almería ayudando a los compañeros de las elecciones andaluzas.

Sin embargo, la versión de los cesados es que esa reunión se venía celebrando años atrás y que hasta ahora no se había celebrado por la pandemia. Por lo tanto, si se celebra ahora es porque las circunstancias lo permiten, según argumentan. Pero más allá de la comida, y su idoneidad, el trasfondo del cese está el futuro de Ciudadanos: si el partido debe seguir en solitario o coaligarse con el PP en determinados territorios. Y para eso, habrá que esperar a ver qué pasa en las elecciones andaluzas. Si Cs no logra representación, el debate florecerá. Si Juan Marín y los suyos salvan los muebles el domingo por la noche, el debate se afrontará de otra manera.  Lo que parece claro, a día de hoy, es que la cúpula nacional de Cs no está por la labor de elaborar listas conjuntas con el PP, como han verbalizado en reiteradas ocasiones los dirigentes de Cs. Otra cosa es lo que suceda el domingo por la noche. Y después está las propuestas que reciban determinados cargos de Cs para enrolarse en un futuro en las candidaturas del PP.

Los cesados, en cambio, sitúan el origen de la decisión en la moción de censura de Orihuela. Otros cargos de Cs lamentan que los hasta ahora dirigentes provinciales -ahora relevados- no defendieran, por ejemplo, a los ediles de El Campello que fueron destituidos por el PP en el equipo de gobierno. Y así está en patio.