Tres pymes apuntan el valor del proyecto Industrias Inteligentes por su formato, equipo de expertos y estrategias para crecer

VALÈNCIA. Diferentes estudios como el II Barómetro de Adecco Outsourcing sobre productividad y eficiencia, publicado recientemente, destacan cómo el nivel de productividad y eficiencia medio de la empresa española se sitúa en 54,4 puntos en una escala de o a 100, lo que supone 4,38 puntos porcentuales menos que el año pasado, cuando tenían una puntuación de 58,78 puntos. Por ello encaminar a las compañías hacia la transformación digital que implica un modelo de mejora productiva es imperante. Y ese es uno de los objetivos del proyecto Industrias inteligentes; el desafío digital del futuro, desarrollado por el Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de la Comunitat Valenciana (COIICV) y financiado por la Agència Valenciana de la Innovació (AVI), que trata de acercar a las empresas el uso y aplicación de las tecnologías necesarias para la transformación digital y, que de este modo, obtengan un modelo de negocio más competitivo.

Un proyecto que va llegando a su fin, a falta de algunas sesiones que abordarán aspectos clave en la transformación digital de las industrias. Por ello desde el COIICV han querido trasladar el testimonio de tres participantes (Ignacio Bedoya, Key Account Regional Ingimec Ingeniería; Miguel Zarco, responsable de Desarrollo de Negocio de Ingeniería Electrónica E.U, y Modesto Martín-Macho, CEO de 4M Arquitectos) y así hacer balance y conocer cómo están valorando las compañías las ventajas de este proyecto.

Así, Ignacio Bedoya, Key Account Regional Ingimec Ingeniería, ingeniería dedicada a la automatización de procesos y el desarrollo de maquinaria a medida en diferentes sectores industriales que desarrolla proyectos tipo llave en mano, destaca que además de la oportunidad de acceder a todas las tertulias y contenidos, “el proyecto nos ofrece asesorías individuales gratuitas con personas expertas en cada materia con los que podemos contactar en cualquier momento para resolver dudas. Esto permite a las empresas profundizar en los diferentes temas de forma más personalizada. Desde el punto de vista de cualquier pyme creo que esto es algo muy interesante”.

- ¿Qué aspectos de los aprendidos en este proyecto llevaréis a la práctica?

Hay varios temas tratados en el proyecto que hemos introducido en el día a día y nos han aportado un valor añadido muy importante. Por un lado, la fabricación aditiva e impresión 3D. El prototipado de los diseños es clave de cara al éxito del buen funcionamiento final de los equipos. Por ello, hemos adquirido una impresora profesional de impresión 3D. La cual nos ayuda mucho en las fases iniciales del proyecto y ahorra tiempo en pruebas para tomar la mejor decisión de diseño. Además mejora los costes productivos, comparado con mecanizados convencionales.

Por otro lado, está la tecnología Big Data. Desde nuestro departamento de Software hemos desarrollado un módulo de IoT propio, que incorporamos a la mayoría de nuestras máquinas. Con ello, el cliente puede monitorizar en tiempo real desde los parámetros de producción a la eficiencia general de cada máquina. Y todos los datos obtenidos se convierten en información útil e indicadores claros para poder controlar la productividad de nuestros equipos. Además, como fabricantes, nos permite diagnosticar de forma ágil cualquier incidencia producida.

Por último, nos resultó muy interesante el tema tratado de Inteligencia Artificial y Machine Learning, ya que es un tema que nosotros ya aplicamos en los proyectos, sobre todo en los que incorporamos Visión Artificial Avanzada y el cada vez más famoso Deep Learning, que está avanzando rápidamente en nuestro sector.

- A la hora de seguir el proyecto, ¿qué importancia tiene para las compañías el formato online en el que se ha desarrollado?

El formato online nos ha permitido seguir fácilmente todo el contenido más interesante para nuestra empresa y además implicar a las personas idóneas del equipo, incluso desde nuestras propias instalaciones. El ritmo del día a día a veces hace difícil aprovechar a las empresas este tipo de programas, pero gracias a la flexibilidad que aporta este formato, no hay excusas para poder aprovecharlo al  100% desde cualquier lugar y horario.

También desde una ingeniería, Miguel Zarco, responsable de Desarrollo de Negocio de Ingeniería Electrónica E.U, especializada en realizar desarrollos electrónicos en su totalidad para la industria, desde circuitos electrónicos a máquinas listas para ser fabricadas, además de especialistas en soluciones basadas en sistemas autónomos, visión artificial, conectividad y audio, así como especializada en dar soporte técnico como consultores a departamentos de I+D,  destaca entre las ventajas del proyecto “la posibilidad de conocer las distintas formas de enfocar la consecución de clientes, a través de una estrategia de comunicación digital bien definida y cómo definir el cliente objetivo”.

- ¿Cuáles han sido las temáticas más fructíferas para vuestra compañía del proyecto, tratándose de una ingeniería?

Las relacionadas con poner en valor las experiencias vividas por algunos de los clientes actuales y enfocar la empresa hacia la resolución de necesidades en sectores concretos.

- ¿Qué aporta a las empresas que entidades como el COIICV y AVI se embarquen en proyectos de este calado?

La posibilidad de acceder a un panel de expertos con mucha autoridad en sus conocimientos que te aportan soluciones concretas y aplicables.

A mi entender es la mejor manera de conseguir una visión externa de tu negocio con soluciones aportadas por mentores que conocen muy bien el mercado en el que nos movemos como ingeniería.

Desde el sector de la arquitectura, Modesto Martín-Macho, CEO de 4M Arquitectos, estudio de arquitectura que nace en 2010 con una visión de la arquitectura centrada en el futuro y la sostenibilidad, y donde la figura del arquitecto se identifica con el cliente para poder reflejar sus ideas, su CEO, recomendaría a otras empresas seguir proyectos como Industrias Inteligentes; El Desafío del Futuro “sin dudarlo”. “Efectivamente es un proyecto corto, no nos vamos a engañar, pero es ese empujón que toda pyme necesita para coger motivación y ver que somos capaces de implementar estrategias ‘reales’ que nos hagan crecer y ganar nicho de mercado. Nosotros hemos salido con las pilas cargadas”.

- ¿Qué ideas habéis extractado del proyecto para poder transformar o hacer inteligente en vuestro caso un estudio de arquitectura?

Lo más importante ha sido corroborar la idea de que no podemos llegar a todo y por tanto siempre será mejor centrar nuestro objetivo en un segmento específico. Nosotros, por nuestro recorrido y experiencia, nos hemos centrado en la arquitectura clínica. Queremos ser expertos de clínicas y dar un servicio integral a todo cliente que trabaje con nosotros. 

Desde una simple reforma hasta asesoramiento a nivel legal, gestionar licencias de actividad y lo más importante, queremos ser capaces de mejorar la experiencia de los clientes en las clínicas. Para nosotros, ellos son nuestro verdadero cliente.

Nuestro objetivo es que sus clientes, por ejemplo en clínicas dentales, tengan la mejor experiencia posible desde que entran por la puerta, esperan en la sala  o salen de consulta. Ayudamos, desde la arquitectura y el diseño, a gestionar, en este caso, la tensión y el nerviosismo característico en este tipo de visitas.

- ¿Este proyecto ha cambiado vuestra concepción de lo que es una industria inteligente? 

Sí. Puede que por desconocimiento, pensáramos que la Industria Inteligente era exclusiva de las empresas grandes. Es cierto que en una pyme los recursos son más limitados. Pero en las jornadas hemos aprendido, que a veces, con poco se puede hacer mucho. Nos han dado esos tips que necesitábamos saber para empezar con nuestras estrategias de marketing digital.