MADRID (EFE). La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha asegurado que "el diésel tiene los días contados, durará más, durará menos, pero sabemos que su impacto en partículas y el aire que respiramos es suficientemente importante para ir pensando en un proceso de salida".
Ribera, antes de comparecer en la Comisión para la Transición Ecológica del Congreso de los Diputados, al ser preguntada sobre si el Gobierno se plantea medidas para facilitar ese cambio en los combustibles que se utilizan, ha manifestado que "el cambio que asistimos necesita muchas cosas a la vez".
Ha explicado que, junto a señales de tipo regulatorio y limitador, el proceso se tiene que acompañar "con facilidades que permitan ir cambiando el patrón que aplicamos e ir cambiando también el patrón de nuestros vehículos privados".
Preguntada sobre qué diría a una persona que se acaba de comprar un coche diésel, Ribera ha manifestado que, aunque las personas que acaban de comprar un coche conocen "en gran medida" las consecuencias que su vehículo tiene en la calidad del aire, es verdad que el coste de comprar un coche de una categoría o de otra no refleja el coste real el impacto que tiene.
Ribera ha añadido que, por tanto, no se puede culpabilizar al que compra ese coche y para facilitar comportamientos de consumidor responsable tiene que haber señales fiscales, de mercado, que permitan discriminar lo que significa cada opción de forma intuitiva y natural sin hacer un "análisis profundísimo".
Respecto a si el Gobierno se plantea cambios en la fiscalidad para facilitar el proceso de transición a la descarbonización, Ribera ha señala que ello corresponde al Ministerio de Hacienda.
Medidas del Gobierno en materia de movilidad
En cuanto a las restricciones que quiere poner el Ayuntamiento de Madrid a los vehículos más contaminantes, ha respondido que le parece muy "razonable y normal que la alcaldesa de un gran capital, como es Madrid", Manuela Carmena, "se plantee medidas para facilitar una movilidad de calidad, pero que afecte cada vez en la menor medida posible a la salud de los ciudadanos".
Preguntada si el Ministerio que dirige tiene planteadas medidas en materia de movilidad, ha contestado que todavía no, pero "es evidente que la acción en materia de movilidad no sólo es acción local".
En este sentido, ha dicho que el Gobierno de la Nación "tiene que plantearse qué señales fiscales, qué señales regulatorias y cómo acompaña a las grandes ciudades en ese proceso de cambio".