Hoy es 6 de noviembre

socialmente inquieto / OPINIÓN

Sorprendentes actuaciones en el Benacantil

7/09/2020 - 

En un entorno extraordinario a los pies del castillo Santa Bárbara, una de las señas de identidad de la ciudad, hoy disfrutamos de un bosque en el monte Benacantil en Alicante y no es por casualidad. Que tengamos este pulmón verde en pleno centro de la ciudad, no es solo fruto de la naturaleza. Que a los alicantinos nos complazca tener esta arboleda es consecuencia de la dedicación de las diferentes corporaciones municipales que velaron y velan por su conservación. Y, por supuesto, por el cuidado necesario e imprescindible de aquellos que la visitan, la recorren, descansan y se refugian del sol bajo la frondosidad de las copas de sus árboles. 

Pero no fue siempre así. Nos tenemos que remontar a principios del siglo XX para conocer el porqué de esa afirmación. La inquietud de un concejal y un alcalde del Ayuntamiento de Alicante, junto con un ingeniero de montes, fueron la coalición perfecta para emprender una gran actuación medioambiental en el Benacantil: hacer un "pulmón verde sanitario" en el centro de la ciudad. 

Antonio Rico Cabot, que ya se había empeñado en la realización de la repoblación del monte Tossal a los pies del castillo San Fernando, se implicó en esta nueva obra con el apoyo del alcalde Federico Soto y de la Dirección General de Montes. Para hacer ese pulmón verde eligieron al que creyeron más cualificado para que buscara y emprendiera la mejor de las soluciones: este fue el ingeniero aspense Francisco Mira i Botella.

Mira ya tenía fama como ingeniero antes de sembrar el monte Benacantil. Fue quien ideó y puso en práctica la forma de contener y mantenerlas dunas móviles de arena de Guardamar del Segura, designado para este trabajo a través de la Real Orden del Proyecto de Defensa y Repoblación de las Dunas de Guardamar aprobada el 2 de diciembre de 1897. Su fachada marítima había perdido en el siglo XVIII buena parte de su arbolado para la construcción de barcos por lo que la arena de la playa y de las dunas invadían el pueblo con riesgo a sepultarlo. Con empalizadas de estacas, la plantación de gramíneas de costa, piteras, palmeras datileras y eucaliptos, así como -posteriormente – la siembra de 600.000 pimpollos de pino piñonero,marítimo y carrasco en 846 hectáreas y en 16 kilómetros de fachada marítima, Mira consiguió evitar la invasión de la población por parte de la arena.

Fue una colosal obra de contención. Este extraordinario resultado fue aplaudido por el rey Alfonso XIII que quiso manifestarlo expresamente con su visita a Guardamar en 1923. Esta población tiene con el Ingeniero Mira –quien dedicó tres décadas de su vida a salvarla de la arena (1900 a 1930)- varias muestras de gratitud declarándole Hijo Adoptivo de Guardamar y colocando dos estatuas de este ingeniero en lugares estratégicos de esa localidad. 

Permitan que volvamos al monte Benacantil en Alicante y a las actuaciones que Mira hizo en sus laderas. No lo tenía fácil, era "un terreno árido y seco que lejos de agradar la vista de las gentes, sirve de reflector de los rayos solares para daño de todos", según se expresaba el Diario de Alicante el 27 de enero de 1912. El ingeniero Mira hizo ese año diversas terrazas de bancales para plantar miles de pinos carrasco en lo que antes era terreno baldío con varios desniveles en la ladera del monte. Actualmente aún podemos disfrutar de muchos de esos pinos. 

Los alicantinos de entonces reconocieron la imaginación, el esfuerzo y la labor del ingeniero Mira y le gratificaron con la Medalla de Plata de la ciudads egún se dice en el acta del Ayuntamiento de 13 de enero de 1922 en el que se afirma que se le concede esta gracia "por su labor meritísima en la repoblación forestal del monte Benacantil, obra altamente beneficiosa para la ciudad, que el ilustre técnico viene dirigiendo desde su iniciación". Posteriormente, se le nombró Hijo Adoptivo de Alicante según consta en el acta del Ayuntamiento de 4 de mayo de 1925 en la que se dice –entre otras cosas– que "con la repoblación del Benacantil, tan justamente elogiada, ha hecho un gran bien a Alicante, no sólo bajo el punto de vista estético, sí que también en el orden higiénico". En el parque llamado de La Tuna, en el mismo monte Benacantil, hay una placa conmemorativa que así lo manifiesta. Dice así: "Sirva este árbol como recuerdo del Ingeniero de Montes Francisco Mira Botella (1863-1944) ...".

Hoy podemos recorrer este bosque del Benacantil por diferentes caminos y, sobre todo, a través de un sendero urbano. Se sorprenderán si no lo conocen. La Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Alicante está desarrollando una red de senderos urbanos en espacios naturales, parques y senderos ambientales de la ciudad, unos 50 kms en total. "El objetivo es facilitar un senderismo al alcance de la ciudadanía de Alicante y turistas que visitan la ciudad; aprovechando las especiales características de Alicante: costa, playas, amplias zonas verdes y elevaciones montañosas próximas al núcleo urbano, así como la climatología y la distribución urbanística". 

Son varios los senderos urbanos que se han desarrollado y recorren Alicante gracias al entusiasmo y al trabajo de José Vicente Gómez Carrascosa, Jefe del Departamento de Educación Ambiental, y su equipo. Un amplio programa de actividades al aire libre nos lleva por itinerarios ambientales por el Parque inundable La Marjal o el Parque Lo Morant, así como senderos por la sierra de los Colmenares, sierra de San Julián, monte Orgegia, isla de Tabarca o monte Benacantil, entre otros. Este último guarda varias sorpresas con la vegetación, la fauna y unas extraordinarias vistas de la ciudad.

La plantación de Alicante y la reforestación de Guardamar fueron actuaciones colosales con excelentes resultados. Con la plantación del bosque urbano se adelantaron a su tiempo. Hoy todo ayuntamiento que se precie los tiene y aumenta. Más aún con la inquietud que hay sobre el cambio climático, el calentamiento global y la urgencia de paliar la contaminación por emisiones de carbono a la atmósfera. Según los datos del Departamento de Agricultura y la Agencia de Protección del Medio Ambiente de EEUU, un árbol puede absorber a lo largo de su vida una tonelada de gases del efecto invernadero, producir oxígeno, reducir la temperatura del aire, reducir el efecto de las inundaciones y de las sequías, generando un entorno saludable. En muchos países se están haciendo plantaciones masivas de arbolado.

¿Qué se hace en Alicante? Esa sensibilidad existe, vean. En el Día del Árbol del 21 de febrero de 2019 se hizo una reforestación en la parte trasera del CEAM Benacantil con plantas arbustivas y árboles facilitadas por el vivero forestal de la Conselleria de Medio Ambiente. El 30 de noviembre del mismo año hubo otra reforestación en el Benacantil, celebrando el 50 aniversario de Masatusa: cincuenta años de transporte urbano en autobús en Alicante sustituyendo a los viejos tranvías, con la asistencia de Luis Barcala, alcalde de Alicante, y Antonio Arias, consejero delegado y vicepresidente de Vectalia. Plantaron 300 árboles de especies mediterráneas (1 por cada empleado de esa empresa de transportes). 

Hay otras actuaciones fuera del Benacantil como la que se hizo en marzo pasado entre la Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento y la asociación Enamorados de Alicante: la reforestación en el monte Orgegia con la plantación de 2.000 árboles y arbustos autóctonos. Manuel Villar, concejal de Medio Ambiente, dijo que "el objetivo de esta campaña de reforestación anual es recuperar árboles y arbustos tradicionales en entornos protegidos como es el monte Orgegia, fomentar la recuperación paisajística de un entorno protegido de Alicante, contribuir a la reducción del C02 y a mejorarla calidad del aire". O la que está pendiente de realizarse por el club rotario Alicante Lucentum y el Ayuntamiento en la zona verde de la parcela municipal situada en el PAU 5 entre la Avenida de las Naciones y la Avenida del Fotógrafo Francisco Cano, para desarrollar durante varios años el proyecto educativo "Bosque Rotario". 

Todo suma para la Agenda 2030 y cumplir los objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), Programa impulsado por la Organización de Naciones Unidas (ONU).

Pascual Rosser Limiñana

next
x