VALÈNCIA (EP). Esquerra Republicana, Bildu y Más País-Compromís, socios habituales del Gobierno de coalición, han expresado su rechazo a la propuesta anunciada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de avalar la compra de viviendas por parte de jóvenes y familias con niños a cargo, pues avisan de que va a suponer un incremento del precio de la vivienda.
Así lo ha expresado en rueda de prensa la portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurúa, quien directamente cree que la medida "no va a bajar el precio de la vivienda", sino justo lo contrario, de manera que se incrementará el "sobrendeudamiento" y se fomentará la "burbuja inmobiliaria". Además, la diputada ha dicho que se trata de una medida "que la derecha aplaude" y es "contraria al interés general".
Por su parte, el portavoz de Esquerra Republicana (ERC), Gabriel Rufián, también ha desdeñado la iniciativa y ha instado plantear directamente una nueva ley hipotecaria para poner "límites a la banca". Y es que, a su juicio, "más que avales", la gente "necesita un acceso real a una vivienda pública o a un precio adecuado, y no a precio de Palacio".
Este lunes, el portavoz de Más País, Íñigo Errejón, ya había criticado la propuesta, porque a su juicio no funciona e "infla" el precio de la vivienda". "Que el Estado funcione como avalista para la compra de vivienda de aquellos que ya se lo pueden permitir es una transferencia de dinero público a manos privadas", llegó a decir.
De su lado, el diputado del PDeCAT Genís Boadella no ha entrado a valorar la propuesta anunciada porque su formación "la desconoce totalmente", por lo que tampoco ha podido asegurar su apoyo parlamentario a la misma.
Eso sí, ha criticado que se anuncien medidas de este tipo en mítines electorales y no se ejecuten "reflexiones profundas y políticas serias". "No nos gusta que se anuncie con tan poco rigor en plena campaña, que no se consensúe con el resto de grupos o no se haga un tanteo para los posicionamientos", ha zanjado.
Pero estas no han sido las únicas formaciones en criticar la propuesta. También la CUP y el BNG se han mostrado reacios a la medida. En primer lugar, la portavoz de la CUP, Mireia Vehí, ha admitido que muchas personas se enfrentan a la problemática de no poder pagar la entrada de una vivienda, cree que el jefe del Ejecutivo "juega con los miedos y las miserias de la gente".
"Pone una alfombra roja a la burbuja inmobiliaria" y constituye "una transferencia directa del Estado al capital privado", ha indicado Vehí, que ha resaltado que Reino Unido puso en marcha una medida similar que implicó que los precios de la vivienda aumentaran. Por todo ello, ha vuelto a reclamar limitar los precios de la vivienda.
El portavoz del Bloque Nacionalista Galego (BNG), Néstor Rego, se ha expresado en un sentido similar. Así, ha indicado que la medida puede provocar el incremento de los precios de la vivienda, sobre todo si se tienen en cuenta las experiencias habidas en otros países.
Además, ha criticado el tono electoralista de la medida, diciendo que "después de cuatro años de no hacer absolutamente nada" y a un mes de las elecciones, este es el "cuarto gran anuncio" que Sánchez hace en relación con la vivienda.
"Nos lleva a pensar que más que un interés real en solucionar el problema, su interés es electoral para intentar arañar unos cuantos votos", ha apostillado Rego, que además cree que las medidas "muchas veces son de dudosa aplicación".