ELCHE. 2018 es una cifra que suena realmente futurista. Uno de esos años que en las películas de ciencia ficción del siglo XX saldría vestido con coches voladores, metrópolis imposibles y unos cuantos robots conscientes de sí mismos y ayudando de buena voluntad a la raza humana. O no. Algo de esto hay en la actualidad, aunque poco, ante la dificultad y la investigación que requiere cada avance. Un mundo en el que los robots tienen cada vez más implantación, no sólo en lugares lejanos como unos almacenes de Amazon o asombrosas máquinas del Instituto de Tecnología de Massachusetts. Hace tiempo que llegaron para quedarse y sus posibilidades pueden ser infinitas, como en el ámbito de la educación y la cultura, donde proyectos como el de la empresa del Parque Científico de la UMH El Caleidoscopio acercan este pedazo de futuro a los más jóvenes.
En este estrenado nuevo año El Caleidoscopio lanza la quinta edición de ‘Programa tu obra-Teatro Robótico’, una propuesta en la que estudiantado de la ESO y Bachillerato aprenderán a programar sus propios robots, que tendrán su propio papel en obras de teatro y cortometrajes. Una propuesta que llega a 26 centros educativos de toda la Comunitat Valenciana tras la formación de una treintena de docentes que empezó en el pasado noviembre. Fueron formados en Tecnología e Informática para que aprendieran a programar robots y en Lengua, Literatura y Plástica para aplicar esos conocimientos en la elaboración de guiones, vestuario y decorado.
Su formación finalizará en febrero, momento en el que ya estarán en condiciones de transmitir esos conocimientos a su alumnado. Todos juntos deberán crear, diseñar y dirigir un corto o una obra de teatro que incluya a un robot entre los participantes de los mismos. El resultado verá la luz en mayo en una Muestra organizada por la propia compañía en la que se proyectarán y representarán estas manifestaciones artísticas. El objetivo que persigue esta propuesta es la hibridación entre el mundo de la tecnología, la cultura y las artes. La empresa ha contado con la colaboración de 22 ayuntamientos de la comunidad.
Se trata de una de las diversas iniciativas que El Caleidoscopio lleva a cabo, siempre con el objetivo de acercar a la sociedad el conocimiento y la cultura científica de una forma desenfadada pero directa y rigurosa. Las otras son Big Neurona, un museo móvil interactivo con forma de neurona gigante para conocer la teoría científica de las neuronas espejo; La Feria Aérea, que enseña al estudiantado a montar un dron y darle un uso en su localidad; el Ros Film Festival, el primer festival online de cortometrajes con temática robótica y Experimentazz, un espectáculo de humor, ciencia y jazz para explicar el funcionamiento del cerebro ante las emociones.